Un niño de aproximadamente dos años murió al caer del jeep que conducía su padre por las playas de la localidad balnearia de Orense, a unos 70 kilómetros de la ciudad de Necochea.

Según informó el subcomisario Manuel Navarro, de la Policía local, «el pequeño golpeó con su cabeza contra el suelo y murió en el acto».

De urgencia lo llevaron al dispensario local para relizarle los primeros auxilios, pero «ya estaba fallecido», informó el oficial en diálogo con un canal de cable de esa localidad.

También indicó que el jeep no era alquilado, sino que era propiedad de la familia, la cual es oriunda de Monte Grande, en el Gran Buenos Aires, y habitualmente elige Orense para pasar sus vacaciones.