Gabriel S. se fugó de la Agencia de Investigación Criminal (ex PDI), ubicada en Lamadrid al 500, horas antes de ser imputado.

El evadido fue detenido en el marco de la investigación por la muerte de Franco Miguel Navarro, conocido como «Gordo Milhouse», quien fuera asesinado de varios disparos el pasado 29 de enero en Isola al 300 bis, e iba a ser imputado este domingo por tenencia de arma de fuego, pero un día antes se escapó de la sede policial.

La víctima se encontraba en su casa cuando personas no identificadas que pasaban por allí efectuaron al menos 10 disparos de arma de fuego hacia el edificio. Los plomos impactaron en la zona de espalda, hombro y brazo de la víctima produciéndole el fallecimiento en el lugar. El joven fue hallado por vecinos en el primer piso donde habitaba. En el lugar se encontraron varias vainas servidas calibre 11.25.

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El sospechoso fue detenido el día sábado en horas de la madrugada en allanamientos realizados por la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos y la Unidad de Homicidios Dolosos en relación a diversas investigaciones, una de ellas sobre un hecho de homicidio de Navarro.

En dichos allanamientos en uno de los domicilios se encontró a Gabriel S. con un arma de fuego de guerra, por lo que fue detenido e iba a ser imputado el domingo 23 de febrero en el Centro de Justicia Penal Rosario por el delito de tenencia de arma de fuego.

El detenido había sido trasladado el sábado a sede de la Agencia de Investigación Criminal (ex PDI). Y según primeros indicios y testimonios recabados, Sosa se encontraba en una celda, uno de los oficiales que se encontraba de guardia le dejó la comida y trasladó unos papeles, momento que aprovechó el detenido para evadirse.

El fiscal Matías Edery solicitó relevamiento de cámaras de dicha sede, se dio intervención a personal de la Agencia de Control (ex asuntos internos), para la toma de testimonios de efectivos presentes, secuestro del libro de guardia, secuestro de celulares, relevamiento del lugar e inspección de la celda para verificar si el mecanismo de seguridad de la misma fue forzado o no.

Se pudo corroborar además que hay una ruptura en el techo de la celda por el cual hasta el momento no se descarta que haya sido utilizado para salir.