Las declaraciones del ex fiscal Gustavo Ponce Asahad el pasado viernes causaron revuelo en los otros estamentos del Estado y las reacciones no tardaron en llegar.

Tras haber reconocido que recibió coimas del juego clandestino, el ex fiscal Ponce Asahad prendió el ventilador y brindó detalles de la organización e identificó a sus integrantes, que no solo pertenecen al Poder Judicial y la Policía, sino al Poder Ejecutivo y Legislativo.

Entre las declaraciones más resonantes, indicó que al senador Armando Traferri como el organizador de la estructura ilegal del juego, y éste no tardó en dar su respuesta. El legislador negó las acusaciones y adelantó que este miércoles se pondrá a disposición de los investigadores de la causa.

Según trascendió, el dirigente peronista mantuvo este lunes una extensa reunión con su abogado y decidió, además, que presentará un escrito como respuesta formal a las denuncias ante los fiscales a cargo, Matías Edery y Luis Schiappa Pietra, con copias para sus pares del Senado.

Por otra parte, y al sostener su inocencia Traferri no tiene previsto alejarse de su banca ni tomar licencia, mientras que recién este lunes llegó a la Cámara alta la declaración completa de Ponce Asahad realizada el pasado viernes. Al menos hasta el domingo no había llegado a la Corte Suprema de Justicia provincial, donde también se ordenó elevar una copia.

El viernes a última hora sí tuvieron acceso a todo el descargo del detenido ex fiscal en la Cámara de Diputados, donde el presidente del cuerpo, el socialista Miguel Lifschitz, convocó a una reunión de labor parlamentaria donde, probablemente, también se entregue la declaración a cada diputado provincial.