Las cuatro mujeres  detenidas durante la noche de este miércoles, en las inmediaciones del Congreso, fueron liberadas este jueves por la mañana. En total fueron seis los detenidos y resta confirmar la liberación de otros dos hombres. 

Una de las mujeres es Ivana Bunge, militante de la Unión Cívica Radical, quien fue aprehendida junto a otras tres mujeres, Abril Taborda, Agustina Goncalves y Jennifer Bogarin, por efectivos de la Policía Federal cuando, según denunciaron, se encontraban cantando el himno en una de las calles adyacentes al Parlamento.

En la madrugada las cuatro mujeres habían sido trasladadas a la Superintendencia de Investigaciones Federales y permanecieron mucho tiempo incomunicadas. Sus familiares pasaron toda la noche en la puerta del edificio porque nunca les permitieron el acceso ni el contacto con ellas, sólo tuvo este permiso un abogado de la UCR. Tampoco habían dejado ingresar a agentes del Ministerio Público Fiscal durante la noche, que sí pudieron hacerlo pasadas las 8 de la mañana del jueves.

 
 
 
 
 
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Todos los detenidos estuvieron alojados en la Alcaidía de la Superintendencia de la Policía Federal, ubicada en la calle Madariaga, y se les imputó el delito de “flagrancia”. Según los testigos, las cuatro mujeres participaban de la protesta contra la iniciativa que había comenzado desde horas de la tarde.

«Había un grupo de chicas cantando el himno, las golpearon, se las llevaron y no dejaron que nos subiéramos (al móvil policial) para preservar su integridad», denunció ante la prensa Eduardo Toniolli, diputado de Unión por la Patria (UxP).

«Hay que preservar la integridad física de las personas que no hicieron nada. Es una detención ilegal», sostuvo el legislador.

Por su parte, el titular del comité nacional de la UCR, el senador nacional Martín Lousteau, se hizo eco de estas detenciones y le reclamó al Gobierno Nacional, responsable del operativo, que diera información sobre el hecho

“Pedimos al gobierno nacional conocer el estado de la militante radical Ivanna Bunge y las otras mujeres detenidas en la noche de hoy. Exigimos su liberación inmediata”, escribió Lousteau en X a última hora de ayer.

En tanto, la diputada nacional por la provincia de Buenos Aires (Evolución) Danya Tavela calificó como «muy grave» la detención de los manifestantes. «Fue muy grave la detención, ya estamos exagerando cualquier tipo de debate», sostuvo la legisladora esta mañana en declaraciones a El Destape Radio.

Tavela consideró que ese hecho «fue lo más grave que sucedió ayer» en las afueras del Congreso nacional porque se detuvo «a Bunge por estar sentada en la vereda cantando el himno con las compañeras».

La diputada destacó que la gravedad está dada además porque «se produce en el marco del tratamiento de la ley Bases que busca criminalizar la protesta».

Desde el Ministerio de Seguridad se indicó que la policía actuó bajo instrucción de hacer cumplir el protocolo de orden público que prohíbe los cortes de calle durante las protestas.

El avance sobre los manifestantes de los uniformados, incluso con carros hidrantes, se produjo en dos etapas en las últimas horas de la tarde.

En estos operativos hubo un detenido, un ciudadano chileno de unos 30 años, según informaron fuentes policiales.

Pese a las órdenes que recibieron las fuerzas de seguridad de desalojar las calles adyacentes al edificio parlamentario, las arterias quedaron igualmente ocupadas tanto por los efectivos como por los manifestantes.

Inicialmente hubo un avance de gendarmes y policías sobre la multitud y se registraron escaramuzas entre ambos sectores en la pugna por los espacios, pero luego los ánimos se calmaron en medio de la movilización que se sostenía en una tarde en la que la temperatura superaba los 35 grados.

Los activistas denunciaron ante la prensa haber recibido «palazos» y «gases» por parte de las fuerzas de seguridad.

Pero poco después, con la llegada de los prefectos, se reavivó la tensión y hubo un nuevo enfrentamiento en el que el líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, cayó y estuvo inerte en el asfalto durante varios minutos, hasta que se recuperó.

La diputada del FIT Myriam Bregman, al enterarse del accionar de las fuerzas de seguridad, salió del recinto y se acercó a la protesta para señalar ante las cámaras de televisión que «Patricia Bullrich está montando un show para justificar la ley. Lo quieren tapar con esto».

«Es lamentable que tantos sectores se presten a este mamarracho de Bullrich, provocar y provocar. Montó una provocación afuera», apuntó Bregman, y añadió que la ministra «quiere ver palos, sangre y represión».

El operativo de seguridad incluyó un vallado metálico en todas las veredas del edificio del Congreso y numerosos efectivos y carros de asalto, camiones hidrantes, motos y camionetas y micros de las fuerzas de seguridad en calles y avenidas adyacentes.