El cuerpo sin vida de una mujer de 35 años fue hallado este lunes por la tarde en un descampado de la localidad de San Jorge. Tenía signos de haber sido abusada sexualmente.

Segúna las primeras informaciones el cuerpo de María Florencia Gómez Pouillastrou fue encontrado por una persona que caminaba por la zona. La víctima, conocida militante feminista y madre de dos hijos de 3 y 5 años, era ex pareja del concejal Lisandro Schiozzi, del Partido Comunista, quien relató que su ex mujer había dejado a los chicos a su cuidado despúes del mediodía para salir a caminar con una amiga.

María Florencia, quien además era una ferviente militante por los derechos de la mujer, fue encontrada boca abajo, semidesnuda y con un fuerte golpe en la cabeza. A última hora del lunes, fue detenido un joven de 24 años y es investigado por su vinculación con el crimen.

Al conocerse la noticia del femicidio, vecinos de San Jorge y organizaciones feministas realizaron una concentración frente al Centro Cívico de la ciudad para exigir Justicia y homenajear a la víctima.

Conmoción

Desde el Partido Comunista manifestaron un profundo dolor por el brutal femicidio de Maria Florencia Gómez Pouillastrou. «Florencia o Flor, como le decíamos, era militante de nuestra organización y una aguerrida activista feminista, furiosa abolicionista que formaba parte de la Comisión de Géneros de nuestra juventud. Era parte de la dirección política de nuestra organización, transformando la realidad social en su Municipio a través del activismo territorial. Luchaba día a día contra las opresiones que imponen el patriarcado y el capitalismo en todas sus formas; en pos de un mundo mejor “donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres”, expresaron.

«El crimen de Florencia fue un femicidio. Un crimen político en manos del patriarcado. Se encontró su cuerpo tendido en la tierra por la que ella tanto luchó, en su cuerpo los rastros de la violencia del patriarcado en su expresión más dolorosa y despiadada. Los medios hablarán del modo en el que se encontró, nosotrxs elegimos hablar de su historia, de su vida y de su lucha. Desde allí exigimos justicia. Atravesadxs por el dolor, nos secamos las lágrimas en el camino de reclamar Justicia organizando la rebeldía que tantas veces la hizo sonreír», manifestaron en el escrito, en el que además, afirmaron: «No descansaremos hasta que se haga justicia por Flor, nuestra Camarada y por todas las pibas: mujeres, lesbianas, travestis y trans que no están. Que su crimen no borre su historia, su crimen como el de todas las pibas es bandera de rebeldía».