El juez federal Marcelo Bailaque procesó a un joven de 18 años por el delito de amenazas anónimas. Se trata de Santiago H., alumno del Instituto Politécnico Superior “General San Martin”, quien el pasado 8 de septiembre de 2016 realizó un llamado telefónico con una falsa amenaza de bomba dicha entidad educativa para no rendir un exámen.

Según precisa el portal fiscales.gob.ar, aquel día, alrededor de las 15, el establecimiento académico ubicado en Pellegrini y Ayacucho recibió una llamada anónima en la cual una voz masculina le refería respecto a la existencia de una bomba en el edificio. Ello alarmó a personal y alumnos del Instituto, y se convocó a personal de la Delegación “Rosario” de la Policía Federal Argentina, que revisó el lugar sin encontrar explosivo alguno.

La investigación por el suceso recayó en la Fiscalía Federal N°1 de Rosario, a cargo del fiscal Degiovanni, quien solicitó el análisis de las llamadas entrantes a la institución, en el horario de la amenaza.

Así se logró dar con tres abonados telefónicos, uno de los cuales correspondía al uso interno de la compañía Telecom, y los restantes a dos mujeres. Así, el representante del Ministerio Público Fiscal encomendó una serie de tareas de investigación que permitieron determinar que una de esas líneas pertenecía al domicilio donde Herrera vive junto a sus padres.

El juez consideró que “el imputado habría realizado el llamado intimidatorio al establecimiento educativo al que concurría a los fines de evadir el examen que estaba programado para esa fecha».

Asimismo, en el marco de la investigación se estableció que el joven era alumno regular del 6° año de Educación Técnica Profesional de Nivel Secundario de dicha institución- y que ese día estaban programados diversos exámenes, entre los que se contaba el de la asignatura “Algoritmos y Estructuras de Datos Avanzados”, el que debía rendir el imputado.

Luego de la recolección de pruebas, el magistrado consideró que “el imputado habría realizado el llamado intimidatorio al establecimiento educativo al que concurría a los fines de evadir el examen que estaba programado para esa fecha, por lo tanto, corresponde disponer su procesamiento por considerarlo probable autor del delito de amenazas anónimas”.

Fuente: Fiscales.gob.ar