Este lunes se realizó la audiencia imputativa a cuatro personas acusadas de participar en el homicidio de Carlos “Bocacha” Orellano, a casi un año de que el cuerpo del joven rosarino apareciera flotando en el río Paraná, en cercanías del boliche Ming, donde había ido a bailar la noche anterior. Los cuatro imputados permanecerán en prisión preventiva.

De las cuatro personas imputadas este lunes, dos trabajan como policías y prestaban servicio de seguridad en el boliche Ming, mientras que las otras dos eran seguridad privada del local bailable.

Los dos policías acusados ya habían sido imputados en diciembre último, pero en la jornada de hoy se los reimputó. En tanto, los dos individuos restantes fueron detenidos el pasado sábado luego de que se realizaran una serie de allanamientos en el marco de la causa que investiga la muerte de Orellano.

A K.L.G., de 41 años, y a G.J.N., de 38, ambos policías, se los imputó por los delitos de Incumplimiento de los deberes de funcionario público, falsedad ideológica de instrumento público agravada y homicidio simple con dolo eventual en carácter de coautores, en grado consumado y en concurso real. En tanto, a F.C.M., de 53 años, y a E.O.L., de 30, se los acusó por el delito de homicidio simple con dolo eventual en carácter de coautores.

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El 24 de febrero de 2020, las personas imputadas se encontraban cumpliendo tareas de seguridad en el boliche rosarino Ming River House, que está ubicado en el complejo La Fluvial. Las primeras dos lo hacían como servicio de policía adicional, mientras que los otros lo hacían como seguridad privada.

Según la investigación a cargo del fiscal Patricio Saldutti, entre las 4.30 y las 5 de la mañana las cuatro personas imputadas habrían retirado del boliche a Carlos Daniel “Bocacha” Orellano –quien había ido a bailar a este lugar- y para esto se presume que ejercieron violencia física contra el joven dentro del complejo La Fluvial.

Tal como destacaron desde Fiscalía, esta agresión se produjo en cercanías al muelle 3, cuando la víctima y los sospechosos estaban fuera de boliche. En tanto, detallaron que los cuatro imputados rodearon al joven contra la baranda del río Paraná, aprovechándose de la superioridad física y numérica, y lo golpearon. Este accionar, provocó que Orellano “salte las barandas de protección del muelle y caiga a las aguas del río, circunstancias que le provocaron el fallecimiento”, según determinó Fiscalía.

Tras dos días de búsqueda, el cuerpo del joven fue hallado el 26 de febrero a la altura del kilómetro 418 del Paraná, en cercanías del boliche.

Además, la investigación sostiene que unos minutos después de que Orellano cayera al río, la policía K.L.G. –una de las imputadas- dio aviso a personal de Prefectura Naval Argentina (el llamado se hizo a las 5.30 am) y a la central de emergencias del 911 (a las 5.36 am), donde advirtió que un joven había caído al río pero omitió los detalles que la involucraban tanto a ella como a sus compañeros.

Una vez relizadas las llamadas, los cuatro imputados se retiraron del lugar “sin brindar colaboración con las tareas de rescate de la víctima, impidiendo con su accionar que el personal de Prefectura Naval que concurrió tras el llamado pudiera llevar adelante de manera efectiva las primeras acciones de búsqueda y rescate”, señaló Fiscalía.

En la audiencia imputativa de este lunes, el Juez de Primera Instancia, Gustavo Pérez de Urrechu, tuvo por formalizada la audiencia imputativa y dictó prisión preventiva efectiva para los cuatro imputados.

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Además, se aclara que el pasado 11 de diciembre, ya se había imputado a los policías K.L.G. y G.J.N por los delitos de Incumplimiento de los deberes de funcionario público en carácter de coautores y en grado consumado y falsedad ideológica de instrumento público agravada en carácter de coautores y en grado consumado.

En tanto, en aquella oportunidad también se había imputado a los policías B.B.L., de 34 años, y P.A.B., de 42, por el delito de Incumplimiento de los deberes de Funcionario Público en carácter de autores y en grado de consumado.

En diálogo con los medios, entre ellos Conclusión, el fiscal Saldutti reiteró que “los dos policías adicionales ya habían sido imputados en diciembre por otros delitos” y sostuvo que, en principio, las cuatro personas imputadas este lunes son sospechosas de ser “coautores del delito de homicidio de Carlos Orellano”.

“La imputación fiscal demuestra que (Orellano) habría caído con vitalidad a las aguas del Paraná y habría fallecido en el río. Lo que se imputó es la conducta que se sucedió sobre el muelle, que determinó la caída de Orellano al agua. Ahí es donde la Fiscalía plantea que hubo una agresión, un amedrentamiento, un acorralamiento de estas cuatro personas que hoy han sido imputadas contra la víctima, y de esta forma se determinó la caída en vida”, explicó el fiscal.

Patricio Saldutti

Y agregó: “Por el momento, se sabe que esta acción generó el resultado, por eso es dolo eventual. No tenemos elementos contundentes para decir si lo tiraron, si se tiró o si cayó solo al agua”.

Saldutti informó que hasta el momento y considerando las pruebas recabadas por Fiscalía, “no habría más personas involucradas”, pero señaló que aún resta conocer más evidencia que podría confirmar la participación de más personas en el hecho.

Consultado sobre si Orellano murió ahogado, el fiscal aclaró: “Por el informe de diatomeas que llegó la última semana y que decantó en las detenciones e imputaciones, podemos concluir que cayó en vida, por lo tanto habría muerto ahogado”.

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Además, se refirió a los restos de ADN encontrado en el boliche y confirmó que se pidió un cotejo con el material genético de Orellano para saber si los rastros pertenecen o no a la víctima. Si el ADN llegase a pertenecer al joven, cambiaría la hipótesis de la investigación y esto podría significar un cambio en las imputaciones.

“Con la evidencia que tenemos hasta hoy, la imputación que ha generado la Fiscalía es razonable. Cuando llegue la evidencia que está faltando vamos a reevaluar la situación, si se fortalece lo que tenemos hasta el día de hoy –como sucedió con las últimas pruebas- o si se modifica la imputación, ya sea para agravarla o llegado el caso para reducirla”, señaló el fiscal.

En tanto, adelantó que los rastros de ADN hallados en Ming están siendo analizados en el Laboratorio de Huellas Digitales de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, pero aclaró que aún no hay un tiempo fijado para que se conozcan estos resultados.

Finalmente, y en relación a la sospecha que la familia de la víctima tenía sobre una posible eliminación de pruebas, como las grabaciones de las cámaras de vigilancia del boliche, Saldutti expresó: “Yo confió que el proceso de investigación no tuvo irregularidades. Por ahora no hay ningún informe que confirme que se haya borrado alguna prueba”.