Foto: twitter @MauroYasprizza

La jueza de Primera Instancia, Valeria Pedrana, resolvió este mediodía dictar la prisión preventiva por los plazos de ley para Andrés «Pillín» Bracamonte, líder de la barra brava de Rosario Central, investigado por lavado de dinero.

Las primeras horas de este viernes ya se perfilaban como un «día complicado» para Andrés Bracamonte, cuando a las 8.30 la magistrada resolvió que la causa continúe tramitándose en la Justicia Provincial, contra lo que había solicitado la defensa, que pretendía que sea juzgado en el Fuero Federal.

Y apenas pasado el mediodía, se conoció el segundo revés para el cabecilla del paravalanchas canalla, cuando la jueza resolvió dictarle la prisión preventiva por los plazos de ley, es decir, por dos años.

Al término de la audiencia el fiscal Moreno señaló que «de ninguna manera se podía permitir porque se corren los dos riesgos procesales que justamente se buscaban evitar que es el entorpecimiento probatorio y el peligro de fuga»

En cuanto al rol de Rosario Central en el enriquecimiento del imputado, Moreno fue contundente: «El club era la materia prima del enriquecimiento de Bracamonte«.

El fiscal, que confirmó que la pena en expectativa para este delito es de 4 a 13 años de prisión, consideró además que Central resultó perjudicado de hecho ya que, según su apreciación, el patrimonio de Bracamonte y de sus personas allegadas está construido en función de perjudicar al club y a los negocios que le llegaban del club.

«Más empresas que el grupo Techint»

El jueves por la tarde había tenido lugar la primera audiencia, en el Centro de Justicia Penal de Rosario (CJP). Pero las cosas se complicaron por cuestiones técnicas, ya que Bracamonte debía presenciarla por videoconferencia. Finalmente, luego del traslado de «Pillín» al CJP y el inicio de la audiencia, la defensa, que lleva adelante Carlos Varela, hizo un planteo de incompetencia de la Justicia Provincial y pidió que la cause se tramite en el Fuero Federal.

Ante esto, el fiscal Miguel Moreno, que ironizó sobre el estado patrimonial del líder de la barra canalla, afirmando que «tiene más empresas que el grupo Techint», apuntó que lo que generó el activo posteriormente «lavado» se funda en el ejercicio de la jefatura de la barrabrava. «No hay ningún interés de la Justicia Federal y de la Nación acá». «Hace 20 años que ejerce la jefatura de la barrabrava de Central, el ascenso económico que ha logrado es indisimulable”.

En ese sentido, el funcionario reveló que se tomaron “como punto de partida denuncias de (Horacio) Usandizaga, cuando era presidente del club (Rosario Central)” y promovió “un sumario interno contra el socio Juan Carlos Silvetti, porque la barra supuestamente apretaba a jugadores de divisiones inferiores para que firmen contrato con ellos”.

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Moreno también reveló que se vincula a «Pillín» a la venta de jugadores, a raíz de un “cheque hallado en la casa de Bracamonte por suma superior a 600 mil pesos, vinculado a la venta del jugador Gastón Ávila al Club Atlético Boca Juniors”.

“Teniendo en cuenta los bienes que mueve el fútbol, entendemos que lo que encontramos de Bracamonte es la punta del iceberg”, aseguró Moreno.

En cuanto a las múltiples empresas y propiedades que poseen Bracamonte y los miembros de su familia, el fiscal señaló también que «estas personas no poseían ninguna industria propia ni trabajo en relación de dependencia que le generaron ingresos suficientes para adquirir bienes en la magnitud que han adquirido». Y remató : «Pillín Bracamonte de empresario no tiene nada, es simplemente un barra brava».