El fiscal de Homicidios Dolosos, Florentino Malaponte solicitó la pena de prisión perpetua para Fernando G., de 21 años imputado en el marco de la investigación por el homicidio de su pareja Tamara Merlo ocurrido el 10 de junio de 2017.

Así lo manifestó el funcionario del Ministerio Público de la Acusación ante el juez Hernán Postma, en la audiencia preliminar realizada este mediodía en el Centro de Justicia Penal.

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El imputado, es Fernando G., de 21 años pareja de la víctima a quien se le atribuyó la autoría del delito de homicidio agravado por la relación de pareja y portación ilegal de arma de uso civil, por el cual la Fiscalía solicitó la pena de prisión perpetua.

El fiscal Malaponte argumentó su pedido basándose en la declaración del imputado en la audiencia imputativa y en las pruebas periciales y testimoniales recolectadas en la investigación. Además señaló que el imputado brindó versiones contradictorias sobre el hecho.

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En el marco de la investigación se pudo determinar que el imputado vertió dos versiones contradictorias de los hechos. En la primera versión vertida en el hospital Gamen donde fue trasladada la víctima luego de recibir el disparo dijo que al volver de un cumpleaños junto a Tamara y el hijo de ambos en moto, dos encapuchados los siguieron y al llegar a la puerta de su casa los interceptaron con el fin de robarles y le dispararon a la joven. Versión que no convenció a los investigadores porque en ese mismo momento fue detenido.

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También dijo que tenía bronca con gente del barrio Montelari, pero no pudo dar precisiones de nombres ni domicilios de las personas como tampoco de qué tipo de conflicto mantenía con esas personas.

En otra versión de los hechos, y en la audiencia imputativa Fernando G. dijo que estaba manipulando un arma y se le escapó el disparo que terminó con la vida de Tamara. Esta versión fue rápidamente derribada cuando los vecinos de Tamara declararon que fueron dos disparos, que no vieron a ninguna persona encapuchada, que ellos habían ingresado a la casa y que luego de quince minutos escucharon los pedidos de auxilio del joven.

El cúmulo de contradicciones llevó a Fernando G., al banquillo de los acusados, fue imputado y permanecerá en prisión preventiva hasta que finalice el debate oral y público al que será sometido por el delito de homicidio calificado por ser la víctima pareja del imputado, agravado por el uso de arma de fuego y portación de arma de fuego de uso civil, por lo cual el fiscal solicitó la pena de prisión perpetua.

Por su parte, la abogada defensora del acusado, Andrea Siragusa pidió el cambio de calificación por homicidio culposo y solicitó prisión domiciliaria para su defendido. El juez Postma argumentó su negativa al pedido debido a que de acuerdo a la prueba recolectada en la investigación no existe probabilidad de duda sobre la autoría y la mecánica del hecho que se le reprocha.

Ambas partes coincidieron en la conformación de un tribunal pluripersonal para el debate oral y público. El juez Hernán Postma hizo lugar al pedido de la Fiscalía para que el acusado permanezca en prisión preventiva hasta que finalice el juicio.

Finalizada la audiencia preliminar el juez dispuso, con el acuerdo de las partes, que se designe un tribunal pluripersonal, se incorporen las pruebas, pericias, testimoniales y documental probatorios y se fija fecha de inicio de juicio.

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Los hechos

El 10 de junio de 2017 Tamara Merlo de 18 años fue asesinada de un disparo en el pecho. Tenía un hijo de un año y medio y hacía tres que mantenía una relación con Fernando G., de 21 años. Esa fatídica noche, volvían de un cumpleaños alrededor de las 20, pero un disparo en el pecho terminó con la vida de Tamara una hora y media después cuando era trasladada al hospital Anselmo Gamen, donde llegó sin signos vitales.

Las distintas versiones que brindó Fernando G., hicieron que todas las sospechas recayeran sobre él y fue detenido. El fiscal ordenó un allanamiento en la vivienda que compartían y halló partes de un revólver y un celular con el chip destruido.