Este jueves, en los Tribunales Provinciales de Santa Fe, comienza el juicio contra un hombre de 34 años acusado del aberrante delito de abusar sexualmente de dos niñas menores de edad, hijas de su pareja.

Los abusos ocurrieron entre los años 2011 y 2016, siempre en las ocasiones en que la madre de las pequeñas se iba a trabajar y ambas quedaban al cuidado del imputado. Los delitos que se le atribuyen son abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y la convivencia. Además, se le imputa la promoción de la corrupción de menores agravada por la guarda, la convivencia y por ser las víctimas menores de 13 años.

La fiscal Celeste Minitti enfatizó que «debemos recordar que estos abusos fueron cometidos por una persona que ejercía un rol paternal pero en un contexto de violencia física constante ya que, en el caso de ambas víctimas, el acusado amenazaba con matar a la familia de las niñas si contaban algo de lo sucedido».

La acusación también está a cargo de la fiscal Alejandra del Río Ayala quien, por su parte, señaló que «se trata de niñas pequeñas y que tienen una diferencia de edad considerable con el acusado». «Estas particularidades, sumadas a la modalidad y duración en el tiempo, son perfectamente idóneos para adelantar el desarrollo normal, libre y progresivo de la sexualidad de las menores».

Las funcionarias judiciales adelantaron que que pedirán 32 años de prisión para el acuado, una pena que «es proporcional a los delitos cometidos».  «Son los crímenes más aberrantes que se pueden cometer contra niños, niñas y adolescentes», remarcaron. Y agregaron: «A esto se suma la violencia desplegada sobre todo el grupo familiar, el aprovechamiento de quedar a cargo del cuidado de las menores y el daño ocasionado a las víctimas, quienes cargarán con el padecimiento producto del sometimiento a lo largo de su vida”.