Una joven madre que había sufrido graves lesiones cuando su precaria vivienda de Nuevo Alberdi fue consumida por un voraz incendio el pasado 12 de noviembre, falleció esta madrugada como consecuencia de las severas quemaduras que afectaban el 80 por ciento de su cuerpo.
El incendio de la vivienda se produjo el pasado 12 de noviembre en Polledo y Cullen y Ugarte y en el siniestro perdió la vida la pequeña Natasha de 3 años, mientras que otra hija de 5 años permanece internada en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela en estado delicado.
La fiscal Mariana Prunotto está a cargo de la investigación que en un principio, familiares de las víctimas habían denunciado que se trataba de una venganza hacia el esposo de Betina y padre de las menores.
Foto: Gentileza Diario La Capital
