La Justicia procesó en las últimas horas al intendente de Arroyo Seco, Nizar Esper, por la fiesta electrónica de enero de 2017, en la que murieron dos jóvenes por consumir estupefacientes.

Esper, fue procesado por el juez federal Carlos Vera Barros, como responsable del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público, ya que consideró que el intendente habría permitido la realización y prosecución de la fiesta electrónica «Sasha´s New Year Eve Party», el 31 de diciembre de 2016 en el complejo Punta Stage de Arroyo Seco. Además, y según informó el Ministerio Público Fiscal de la Nación (MPF), el magistrado dispuso trabar un embargo sobre los bienes del imputado hasta cubrir la suma de 100 mil pesos.

El MPF ya había solicitado la indagatoria del intendente y otros dos funcionarios locales en 2017 y en 2018 la Cámara Federal de Casación Penal ordenó al juzgado federal que avance en la investigación al respecto. Ahora también se le recibirá declaración indagatoria a los otros dos funcionarios luego de varios planteos del MPF.

En mayo de 2017, habían sido procesados Alan David Van Brook, y Gino Piazzese Scaglia, responsables de la productora «Live Art Producciones» que organizó el evento; Germán Pablo Dalinger, gerente; y Esteban Gómez, encargado del local, de la firma Yameli S.R.L., que explotaba comercialmente el «Complejo Punta Stage», ubicado en la rotonda Arroyo Seco de la Autopista Rosario-Buenos Aires.

La investigación se inició el 2 de enero de 2017, a fin de establecer si en la fiesta electrónica celebrada en el complejo había personas que vendían estupefacientes y si los dueños del establecimiento y/o los organizadores del evento facilitaron el lugar para el comercio ilícito de sustancias. Tanto Guiliana Maldovan como Lucas Liveratore fallecieron tras asistir a la fiesta y presuntamente haber consumido alguna sustancia que les ocasionó la muerte.

Diversos testigos declararon que en el evento había comercialización y consumo de estupefacientes, que hubo hacinamiento porque había más gente que la capacidad permitida para el local, que faltaban bebidas y el acondicionamiento del lugar era deficiente, y que hubo estampidas, maltrato policial y golpes. El 29 de julio pasado, la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario dispuso revocar la falta de mérito en favor de Esper y dictar un nuevo fallo.

Así, el juez federal Vera Barros consideró las pruebas colectadas y dispuso el procesamiento de Esper, al entender que, en su calidad de intendente de Arroyo Seco, permitió el desarrollo de la fiesta electrónica, a pesar de la existencia de legislación provincial y municipal, dictada por el mismo, que prohibía la realización de ese tipo de eventos y regulaba las habilitaciones y funcionamiento de los locales como el complejo Punta Stage.