La indagatoria prevista para mañana al ex titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, en la causa por supuesto lavado de dinero en la que está acusado y detenido el empresario Lázaro Báez, fue postergada hasta el martes 17 de este mes, informaron fuentes judiciales.

El diferimiento de dos semanas fue resuelto por el juez federal Sebastián Casanello debido a que aún continúan declarando en testimonial dos empleados desplazados del organismo recaudador que alertaron sobre maniobras ilícitas.

Se trata de Silvia Buchi y Carlos Blanco, ex empleados de la sucursal Bahía Blanca de la AFIP que denunciaron que existía en el organismo un interés diferenciado en las investigaciones sobre evasión fiscal ya que si bien se detectó a las empresas proveedoras de facturas truchas, no se avanzó sobre las destinatarias, como Austral Construcciones, la empresa de Báez.

El empresario que amasó su fortuna como concesionario de obra pública en Santa Cruz esta procesado junto a seis personas de su entorno acusados por el lavado de 5.100.000 dólares.

Echegaray, hoy titular de la Auditoría General de la Nación, está imputado en la causa acusado de haber permitido que el empresario santacruceño estafara al fisco y se hiciera de fondos ilegales que luego serían parte de la presunta maniobra de lavado.

En su fallo del 18 de abril citándolo a declarar, Casanello imputó a Echegaray haber tenido conocimiento, por lo menos desde hacía dos años, de la estafa millonaria que Lázaro Báez cometía contra el Estado Nacional, «usando como punta de lanza la facturación apócrifa (de esa forma se evitó el pago de tributos a la AFIP)”.

La denuncia de la operatoria fue presentada por la diputada nacional Margarita Stolbizer contra el empresario en la que sostuvo que la AFIP le había permitido una estafa millonaria realizada con facturas apócrifas.