La querella del juicio contra Pablo García, hijo del periodista Eduardo Aliverti, pidió hoy la pena de 15 años de prisión para el joven por haber atropellado y matado al vigilador privado Reinaldo Rodas, al que llevó incrustrado en el parabrisas del auto durante 17 kilómetros por la Panamericana.

En tanto, la fiscal María Inés Domínguez, a cargo de la causa, pidió 8 años de prisión por homicidio doloso, delito que va de 8 a 25 años, y en el caso que el Tribunal desestime esa condena, solicitó la pena de 4 años por el delito de homicidio culposo, que va de 1 a 10 años.

Esta tarde, tras un cuarto intermedio, la familia de la víctima que participa del juicio que comenzó el pasado lunes, se manifestaba en la puerta de los tribunales de San Isidro.

Este jueves por la tarde será el alegato del abogado Adrián Albor, la defensa de García, quien nunca estuvo preso tras el accidente.

«Este hombre nunca estuvo detenido, a pesar de las pericias que se le hicieron y dieron que tenía alcohol. No puedo creer lo cobarde que es. No puedo creer que hayan pasado cuatro años y no tenemos paz», expresó ante la prensa Corina, sobrina de la víctima.

«Tiene que ser condenado, por lo menos 15 años, no menos. Necesitamos justicia por Reinaldo Rodas. Esto le puede haber pasado a cualquiera, lo que está mal es que este chico no lo quiso ayudar», agregó la mujer.

El juicio comenzó el último lunes en el Tribunal Oral N°6 integrado por los jueces Emilio Elías Romualdi, Roberto Alejandro De Cilis, y Walter Rubén Quadrantiy.

El hecho tuvo lugar el 17 de febrero de 2013, cuando el hijodel periodista volvía en su vehículo de una fiesta, estabaalcoholizado, según lo determinó la pericia y atropelló a Rodas llevándolo durante 17 kilómetros incrustado en el parabrisas.

El vigilador iba en una bicicleta rumbo a su trabajo en el country Mapuche cuando fue atropellado en el kilómetro 52,500 de la Panamericana desde atrás por el Peugeot 504 que manejaba García.

Tras el accidente, los estudios de alcoholemia arrojaron queGarcía conducía con 1,45 gramos de alcohol en sangre, casi el triple del nivel máximo permitido.