El fatal accidente ocurrido el pasado viernes, donde un Chevrolet Corsa se incrustó debajo de un camión recolector de residuos y provocó la muerte instantánea de los cuatro jóvenes que viajaban en el vehículo, tuvo sus repercusiones.
Luego del hecho, varias fotos de las víctimas dentro del vehículo siniestrado fueron viralizadas en las redes sociales y sobre todo, en el sistema de mensajería de WhatsApp. En ese marco, la fiscal a cargo del caso Mariana Prunotto, hoy inició formalmente la investigación para conocer quién o quiénes tomaron las fotografías.
Así, Prunotto ordenó peritajes a celulares e impartió instrucciones a la Dirección de Asuntos Internos para determinar si hubo responsabilidad en la filtración de esas imágenes de algunos de los efectivos que intervinieron a poco de ocurrida la tragedia.
La sospechas que existen en torno al caso es que alguien vinculado a las primeras medidas realizadas en el lugar haya fotografiado a las víctimas sin vida, dentro del auto, para luego difundir esas imágenes en redes sociales o que los funcionarios que debían preservar la escena no lo hicieron.
Según trascendió, no se descarta la declaración testimonial de algunos funcionarios para determinar si hubo o no delito. En las fotos, se aprecia el cómo quedó el auto tras el choque, e incluso la disposición de los cuerpos de las cuatro víctimas fatales dentro del habitáculo.
Además, para estos días, se esperan las imágenes que captaron las cámaras ubicadas en la vía pública para determinar la mecánica del accidente.
