Por: Florencia Vizzi 

Creada con la finalidad de unificar las causas que tenían imputados a  funcionarios de cualquiera de las fuerzas de seguridad que hayan cometido delitos en el ejercicio de sus funciones, la oficina fiscal de Violencia Institucional y Corrupción Policial comenzó a formarse en mayo y  se puso oficialmente en funcionamiento el 1 de junio.

A cargo de la fiscal Karina Bartocci, y dependiente del fiscal regional Jorge Baclini, a tan sólo tres meses de su creación, la oficina ya se encuentra investigando unas 320 causas, con más de 20 policías imputados, superando así ampliamente la proyección anual de 600 causas que se había estimado en el momento en que fue conformada.

Tal como lo informó a Conclusión la fiscal Bartocci, la idea original de Baclini fue direccionar las investigaciones y unificarlas, en vista de que “una cantidad importante de las causas en trámite generaban situaciones ríspidas y conflictos de intereses. ¿Por qué? El mismo fiscal que tenía a su cargo a este  personal policial imputado también lo tenía como auxiliar en algunas de sus causas”.

Las denuncias más comunes que se tramitan en la oficina, son las de apremios ilegales, lesiones, extorsiones y defraudación económica. Según especificó la funcionaria judicial, todas las causas se tratarán ahora en esta oficina. “En el momento de su creación se determinó que directamente toda nueva denuncia fuera derivada aquí, y, además, que las causas que se estaban gestionando en otras fiscalías, fueran siendo delegadas, por lo cual, la oficina no empezó a trabajar con carga cero. Absolutamente todas las causas con funcionarios de la fuerza implicados son tramitadas aquí, con la salvedad de aquellas en que el delito es un homicidio, esas causas quedan en la Unidad Especial de Homicidios y Tentativas de Homicidios”, -relató Bartocci en diálogo con Conclusión. 

Por el momento, sólo tres personas trabajan a tiempo completo en la delegación, la misma fiscal, una prosecretaria nombrada recientemente y una abogada. En ese sentido, Bartocci estima que, según lo conversado con el fiscal regional, el próximo año la oficina se va a constituir como una Unidad Fiscal autónoma, con lo cual le serán conferidos otros recursos y una estructura más completa.

En relación a la metodología, detalló que la oficina trabaja en conjunto con Asuntos Internos de la Unidad Regional II, que, según la fiscal, “alivian mucho el trabajo porque hacen a la vez de sumariantes  y División Judiciales de Jefatura, que son también los canales por los que entran las denuncias. En cuanto a si ha notado resistencias de las fuerza policiales hacia la labor que llevan adelante, la funcionaria  afirmó: “No hay resistencia, lo que sí noto son diferentes filosofías de trabajo. En Judiciales son como más cautelosos, toman ciertos cuidados, y van viendo, primero a la obtención de la prueba y después ven si es administrativo o va a la parte judicial, en cambio Asuntos Internos va más al hueso y tiene esa visión de sacar inmediatamente  al “policía malo” de la fuerza. Son como distintas filosofías, pero resistencia hasta el momento, por lo menos, no”

Además, Bartocci comentó que en el ámbito judicial, la iniciativa ha sido muy bienvenida, sobre todo en los juzgados de menores, porque son los que reciben más denuncias por apremios ilegales. “En general, todos los menores al ser detenidos denuncian golpes o lesiones”. Sobre qué porcentaje de esas denuncias son reales, la fiscal afirmó que “podría decirse, por ponerle un número, que un 60 % son demostrables, comprobables y pueden ser elevadas a juicio”. 

Podría decir que al tope de las denuncias que recibimos están las de apremios ilegales y lesiones, sobre todo en menores, detalló. Y especificó: “También por extorsiones. Tenemos además una importante cantidad de denuncias en relación a los abusos cometidos por “patovicas” en bares y boliches, ya que ,en general, son policías realizando adicionales, así que son delitos cometidos en ejercicio de sus funciones. Y también otra importante cantidad por defraudación por lo que se conoce como superposición de horas OSPE. Eso también se debe a una política de mayor control del Estado sobre el tema, ya que las horas extras son una caja muy importante de la provincia”. 

También comentó que están poniendo el ojo sobre las PAT (Policía de Acción Táctica), porque es una fuerza que está teniendo muchas denuncias, tanto por apremios y extorsión, como por defraudación De hecho, dos de las causas más importantes que la oficina está llevando adelante son sobre esos temas y esa fuerza.

Consultada sobre por qué una fuerza nueva puede estar teniendo tantas irregularidades, Bartocci expresó: “A título de una opinión personal, no oficial, podría decir que estimo que es mucho personal, con poca instrucción y poca estructura de mando. Es decir, son chicos muy jóvenes, que salen a la calle armados con escaso tiempo de instrucción, y la estructura de mando es muy pequeña, son pocos jefes para tanta fuerza. Creo que ese es el principal problema”.

La fiscal aclaró que aún no hay causas que hayan llegado a juicio aunque si las hay con detenidos que van a entrar en esa instancia. También explicó que, en la oficina estiman que la mayor parte de lo que allí se tramita, culminará en juicios orales, porque “es realmente poco probable que un policía firme un juicio abreviado, de hacerlo, tiene que admitir su culpabilidad y quedar cesante. Estimamos que eso es lo menos factible”.

En relación a si piensa que es posible, en un tiempo prudencial, hacer alguna diferencia en cuanto a mejorar la calidad y funcionamiento de la fuerza pública desde su lugar, Bartocci es optimista. “Creo que sí, para eso fue creada la oficina y a eso apuntamos. Hay cosas concretas sobre las que se puede trabajar, sentarnos con los jefes de policía y comentarle cuales son los problemas más llamativos, decirles qué es lo que falta o sobre que hay que poner el acento. Ellos mismos están esperando eso, porque la idea es trabajar en una forma coordinada, así que sí, yo creo que se puede hacer una diferencia”, concluyó.