«La Bolsa de Comercio fue utilizada por la firma como un escenario, mediante el cual, exhibiendo una importante magnitud de contratos a traves de sus registros, la empresa mostraba una salud financiera que no era tal. Vicentín recibía granos que en los balances mostraba como propios sin exhibir que todavía no se habían pagado». Con estas palabras, el fiscal Miguel Moreno, de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejo,  hechó un poco de luz a la forma en que la agroexportadora, que afronta una importante cantidad de denuncias por estafa, operaba.

Según explicó Moreno, la causa se conformó con la denuncia un pequeño grupo de acreedores, que reclaman un monto que se aproxima a los 7 millones de dólares, a los que luego se sumó el correacopio Grassi, grupo al que se le adeudan unos 50 millones de dólares y los grupos de bancos internacionales, algunos de los cuales dependen del Banco Mundial y otros del estado holandés y el Banco Macro. La acreencia de estas entidades rondan los 500 millones de dólares.

«Vicentín recibía granos que en los balances demostraba como propios sin exhibir que todavía no se habían pagados, es decir solo se exhibían como activo corriente sin precisar que a su vez eran pasivo corriente porque no habían sido pagados».

Allanamientos

La semana abrió con gran despliegue de allanamientos, que fueron requeridos por Miguel Moreno, en tres localidades del norte provincial, Ricardone, Avellaneda y Reconquista que incluyeron la sede de la empresa en Avellaneda, que fue clausurada y por el momento permanecerá así hasta que se terminen las pesquisas en el lugar, y los domicilios de los ex directivos de la empresa.

Según explicó Moreno, en los procedimientos se secuestró todo tipo de información, física y digital, y «continuamos extrayendo información de las máquinas de la sede de  Avellaneda, relacionada con operacionesy decisiones societarias». También se secuestaron libros de actas de cada una de las sociedades del holding».

El funcionario judicial precisó que también se esperaba trabajar sobre una caja fuerte que aún no se pudo abrir y sobre las terminales informáticas. «Como no contamos con colaboración del personal del establecimiento, se tuvo que prolongar la medidad y, hata tanto no terminemos con eso, es necesario que no se opere en esas terminales».

Además, especificó que los procedimientos también estaban destinados a «deslindar o precisar atribuciones personales sobre los hechos investigados». «Investigamos estafas, que creemos que ocurrieron. Ahora, siendo una sociedad, tenemos que determinar como se conformó la decisión social para cometerlas, entonces el objeto de los allanamientos es precisar el aporte que cada una de estas personas involucradas en los hechos tuvieron en relación con los delitos concretamente».

En ese sentido Moreno agregó que «como toda causa penal, necesita tener imputados, esta medida tuvo como objeto recabar información acerca de quienes van a ser imputados». «En principio las personas denunciadas por los defraudados, las personas que integraban el directorio, síndicos y representantes legales que hayan podido celebrar el nombre de Vicentín contratos tanto con bancos como corredores agropecuarios»