Uno de los tres fiscales que investigan la muerte de la modelo Natacha Jaitt, quien falleció en febrero de 2019 en la localidad bonaerense de Benavídez, afirmó hoy que se recuperó “la totalidad de la información» en la extracción de 56 gigas de contenido de la tablet, la cual sostuvo que será “analizada pormenorizadamente«.

Cosme Iribarren, uno de los fiscales generales de San Isidro, aseguró que se logró «obtener la totalidad de información” que había en la tablet de la modelo, tras la extracción que se realizó el último jueves en los laboratorios de forenses de Gendarmería Nacional.

Ahora la vamos a analizar pormenorizadamente”, indicó Iribarren, quien añadió que “a priori, no se vislumbra la participación de terceras personas en las causales del fallecimiento” de Jaitt, ocurrido el 23 de febrero de 2019.

“El jueves pasado con todas las partes y personal de Gendarmería nos hicimos presentes a hacer la extracción forense que se logró una vez que el sistema UFED premium dio la posibilidad de saber cuál era el ID de la tablet que tenía la víctima. También estuvieron peritos de la Justicia Federal y se logró obtener la totalidad de información y ahora la vamos a analizar pormenorizadamente”, detalló el fiscal en declaraciones al programa “Yo no fui”, de Radio con Vos.

Sobre las versiones de un asesinato que viene insistiendo la familia de Natacha, el fiscal Iribarren aseguró que desde el día de la muerte de la modelo se “hicieron todos los estudios con la seriedad, la celeridad y la objetividad en un caso como este”.

“Lo que está establecido es lo que concluyó los médicos legistas en la autopsia que hubo una falla multiorgánica y nos dan una serie de conclusiones que a priori no vislumbran participación de terceras personas en las causales del fallecimiento. Está en plena etapa de investigación”, explicó el fiscal.

Por último, dijo que hay declaraciones testimoniales pendientes de tomar “ofrecidas por el particular damnificado” y aseguró que la tablet de Natachaestá preservada y guardada y la información que se obtuvo”.

La tablet de Jaitt, un iPad Apple modelo «A1670», fue desbloqueada de manera completa el 7 de este mes en los laboratorios de la Dirección de Criminalística de la GNA.

Del procedimiento estuvieron presentes Iribarren, Diego Callegari y Sebastián Fitipaldi, los tres fiscales del departamento judicial San Isidro que conformaron el equipo de investigación de la causa que está caratulada como «averiguación causales de muerte«.

Aparte de los fiscales de la causa Jaitt, los fiscales federales Carlos Rívolo, Marcelo Colombo y María Alejandra Mángano -estos dos últimos de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex)- enviaron peritos de la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (Datip).

El propio ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, explicó ese día vía Twitter que para abrir el iPad Gendarmería «utilizó la última versión de un software forense denominado UFED (Universal Forensic Extraction Device) adquirido este año por el Ministerio de Seguridad de la Nación para las fuerzas».

La apertura del este dispositivo de Jaitt era la última medida que esperaban lograr para terminar de investigar las circunstancias de la muerte de la mediática e influencer.

Ya se había logrado abrir su teléfono celular, marca Samsung, pero allí no se habían encontrado mensajes o contenidos de interés.

En marzo de 2020, los peritos de la GNA habían logrado una extracción parcial de 4.1 gigabytes comprimidos del contenido de este iPad que incluían casi 20.000 fotos y 370 videos.

Según fuentes judiciales, a partir de los testimonios reunidos y los videos de las cámaras de seguridad del salón de eventos donde ocurrió todo, los fiscales creen que esa noche la tablet nunca salió de la mochila de la modelo.

Jaitt (41) murió la madrugada del 23 de febrero de 2019 en el salón de fiestas «Xanadú», situado en Isla Verde al 600, de Villa La Ñata, Benavídez, partido de Tigre, al que había concurrido por una reunión de negocios para programar un evento.

En un momento de la noche, durante la cual se consumieron drogas y alcohol, la conductora y modelo subió a una habitación donde sufrió una «insuficiencia respiratoria por edema agudo de pulmón» y una «falla multiorgánica», y murió, según los resultados de la autopsia.

Las pericias toxicológicas confirmaron que Jaitt consumió cocaína y alcohol antes de morir en el salón de fiestas Xanadú, y no detectaron la presencia de ningún veneno.

La familia Jaitt siempre sospechó que la muerte de Natacha podía haber sido un homicidio vinculado a algunas denuncias que ella había hecho públicas, aunque para los fiscales todo indica que fue producto del deteriorado estado de salud que presentaba y de la ingesta voluntaria que esa noche hizo de cocaína.