En la primera audiencia de alegatos que se desarrolló en el marco del juicio oral y público por el triple crimen de Villa Moreno donde resultaron asesinados Jeremías “Jere” Trasante (17 años), Claudio “Mono” Suárez (19) y Adrián “Patóm” Rodríguez (21) el 1º de enero de 2012 en el Club Oroño de Presidente Quintana y Dorrego, la Fiscalía y la Querella pronunciaron los argumentos por los cuales consideran que las pruebas presentadas en el juicio, sumado a los testimonios de los testigos, demuestran que los imputados son responsables de los hechos que se juzgan.

Luego del ingreso de los imputados a la Sala 1, la fiscal Nora Marull acompañada por su par Luis Schiappa Pietra, inició la lectura del alegato basándose en el análisis de los hechos a través de cuatro puntos que considera fundamentales: el análisis de los llamados telefónicos, las armas utilizadas en los hechos que desencadenan el triple crimen, la complicidad policial y la estrategia de los abogados defensores.

Luego de analizar todas las pruebas recolectadas punto por punto, entre las cuales mencionó la cronología de los hechos que se sucedieron desde el ataque que recibió Maximiliano “Quemadito” Rodríguez en Garay y Vera Mujica, la llegada de sus “amigos” para socorrerlo, los videos del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez donde se puede observar el ingreso de “Quemadito” acompañado por Delgado, Palavecino y Sprío y luego la llegada de Sergio “Quemado” Rodríguez visiblemente nervioso por lo sucedido con su hijo.

Por otra parte, mencionó en detalle las escuchas telefónicas y el cruce entre los distintos celulares que utilizaban los imputados, lo cual determinó la ubicación de los mismos en el momento del triple crimen. Resultó contundente, además, las declaraciones de los testigos que no dudaron en reconocer a los imputados como los autores de la masacre que no sólo mató a los militantes de Villa Moreno, sino también hirió a varios vecinos que se encontraban en los alrededores del club.

Tras presentar todas las pruebas la Fiscalía solicitó “penas altas” tanto para Sergio “Quemado” Rodríguez, Brian “Pescadito” Sprío y Daniel “Teletubi” Delgado: una condena de 30 años de prisión por homicidio calificado por el uso de arma de fuego y la participación de un menor. En el caso de Sprío solicitó la unificación de la pena, la cual se elevaría a 35 años ya que cuenta con una condena previa.

En cambio, para Mauricio “Maurico” Palavecino, la Fiscalía solicitó la pena de 26 años de prisión por considerarlo partícipe necesario ya que las pruebas lo ubican conduciendo el vehículo que transportó al resto de los imputados al lugar del hecho en la Kangoo blanca descripta por los testigos.

Concluido el alegato de la Fiscalía fue el turno de los abogados querellantes Norberto Olivares, Federico Garat y Jéssica Venturi, representantes de las familias Rodríguez, Trasante y Suárez, respectivamente. Sus argumentos se mantuvieron en concordancia con lo expuesto por los fiscales. Pero el abogado Olivares fue más allá y planteó cuatro enigmas que sus respuestas pueden echar luz sobre la sucesión de los hechos. En principio el planteo de la defensa de la creación de un circo romano, en referencia al juicio, la motivación de los imputados para estar en el lugar del hecho la noche del asesinato, la reconstrucción material de los hechos y por último la necesidad de los imputados de profugarse dejando a su mejor amigo, en el caso de Sprío, Delgado y Palavecino; y a su hijo en el caso de “Quemado”Rodríguez, convalesciente en un hospital y no regresar nunca más.

Por todo lo expuesto y por los riesgos procesales la querella decidió pedir 35 años de prisión para todos los imputados y en el caso de Sprío se elevaría por la unificación de la condena previa.

La lectura de alegatos continuará el lunes donde los abogados defensores Carlos Varela, Adrián Martínez, Ignacio Carbone, Fausto Yrure y Gabriel Navas expondrán sus argumentos.