Efectivos de Asuntos Internos demostraron su inocencia en el caso Franco Casco
Fueron detenidos tres años después de ocurridos los hechos acusados de encubrimiento agravado y plantar pruebas. Finalmente un tribunal les dictó el sobreseimiento por inexistencia de delito. Por la muerte de Franco Casco cuatro policías continúan detenidos en prisión preventiva desde hace más de tres años.
Por Alejandra Ojeda Garnero
Siete años pasaron para que cinco efectivos de Asuntos Internos de la Policía de Santa Fe decidieran contar su versión de los hechos. Fueron acusados de encubrimiento agravado por la Justicia y de «plantar pruebas» para desviar la investigación por la desaparición y muerte de Franco Casco.
En este capítulo de Iter criminis el ex director provincial de Asuntos Internos y Policiales Aníbal Candia cuenta cuál fue su rol y el de sus pares Sergio Pieroni, Carlos Ríos, Daniel Escobar y Pablo Siscaro en la investigación, que en ese momento se enmarcaba en una búsqueda de paradero en la Justicia provincial, y por lo cual luego fueron acusado de encubrimiento agravado.
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El personal de la Delegación Zona Sur de la Unidad Especial de Asuntos Internos realizó algunas diligencias dispuestas por el fiscal que investigaba la causa, desde el 24 de octubre hasta el 8 de noviembre de 2014.
En la mañana del 30 de octubre del 2014 el entonces Secretario de Control de las Fuerzas de Seguridad, Ignacio Del Vecchio declaró ante los medios que Franco Casco había sido visto con vida en una iglesia evangélica ubicada a pocas cuadras de la comisaría 7ª.
Las declaraciones de Del Vecchio no tenían en ese momento ningún sustento material, solo en el testimonio de dos miembros de dicha iglesia que, ante la consulta de rutina en la búsqueda de Franco Casco, manifestaron que había estado en la iglesia la noche anterior y le habían ofrecido ropa y comida.
Fue allí que los efectivos de Asuntos Internos determinaron que la persona que estuvo el 26 de octubre en dicho templo no era Franco Casco sino Leonardo Ramón Salinas. Un joven que frecuentaba la Terminal de Ómnibus. Finalmente lograron dar con el joven quien tenía un importante parecido físico con Franco Casco y de allí surge la confusión. Por esas declaraciones del entonces secretario de Seguridad, fueron acusados de encubrimiento y de «plantar pruebas».
En septiembre del 2017 los cinco efectivos fueron acusados formalmente en la Justicia Federal y detenidos. Vale aclarar que habían transcurrido tres años del momento de los hechos y las detenciones habían sido anunciadas en los medios con una semana de anticipación.
Para el 2 de mayo del 2018 el Tribunal resuelve revocar los procesamientos y dictar la falta de mérito para Aníbal Candia, Sergio Pieroni y Carlos Ríos, por inexistencia de delito. En tanto, Escobar y Siscaro continúan procesados por la declaración de uno de los 32 internos que se encontraban en la comisaría 7º al momento de la detención de Franco Casco, quien manifestó «Nos dijeron que eran de investigaciones que estaban investigando lo de Franco Casco. Yo les dije que no sabía si era Franco Casco, pero un Franco era el que había estado detenido».