En el inicio de la Copa Liga Profesional, que se abría con un esperado partido entre Rosario Central y Godoy Cruz, un nutrido grupo de hinchas canallas se juntó en inmediaciones del Gigante de Arroyito y  pretendieron recibir al micro que trasladaba a los jugadores de Rosario Central. El colectivo debió ser desviado y la Unidad Fiscal Covid-19 investiga se se trató de una convocatoria premeditada.

Se trató de unos 500 hinchas auriazules que se ubicaron debajo del puente peatonal de Parque Alem, con gran cantidad de fuegos artificiales, a la espera de que el colectivo pasara por allí. Para evitarlo, el micro debió desviarse de su recorrido y demorar la llegada al estadio para concretar el duelo con Godoy Cruz.

Se dio aviso a la Fiscalía, que por estas horas investiga si se trató de una convocatoria organizada y ordenó una serie de medidas de prueba, entre ellas, realizar entrevistas a los choferes y jefe de Seguridad de Rosario Central a cargo del micro y la custodia policial. Además, se pidió que se lleve a cabo un relevamiento de cámaras de seguridad y que la Agencia de Investigación Criminal investigue las redes sociales para determinar si hubo una convocatoria previa.