En la jornada de este miércoles 18 de octubre, en la sala 10 del Centro de Justicia Penal de Rosario, se llevó a cabo la audiencia imputativa en la que fue acusado el único detenido por el crimen de Ivana Garcilazo, quien falleció el pasado 30 de septiembre, luego de recibir un piedrazo en la cabeza cuando regresaba a su casa desde el Gigante de Arroyito, donde había asistido a ver el clásico. 

Se trata de Ariel Cabrera, profesor de Educación Física de 42 años. Según los testimonios y las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona de Montevideo y Ovidio Lagos, donde fue atacada Ivana, él es uno de las tres personas que arrojaron las piedras que le ocasionaron la muerte a la joven de 32 años. Sólo Cabrera está detenido, ya que su amigo, Damián Reinfestuel, permanece prófugo desde el día del hecho. En tanto, el tercer implicado aún no fue identificado. 

Días atrás, el fiscal Gastón Ávila adelantó que  acusó a Cabrera, quien se entregó el jueves pasado tras permanecer oculto más de 10 días, por el delito de homicidio agravado. El abogado Marcos Cella es quien representa a la familia de la víctima, en tanto que la defensa de Cabrera quedó en manos de Sergio Larrubia.

Tras la audiencia Ávila manifestó: «El juez aceptó la calificación legal que proponemos desde la Fiscalía, esto es homicidio agravado por ser en el marco de un espectáculo deportivo. Dispuso la prisión preventiva para el señor Cabrera por el plazo legal»

Consultado sobre los argumentos que presentó, esgrimió:»No hubo una oposición por parte de la defensa a que continúe detenido, es decir a que continúe en prisión preventiva, simplemente pidió limitar en el plazo esa medida. Nosotros entendimos, desde la Fiscalía, que cualquier limitación en el tiempo lo único que hacía era ponernos trabas en la investigación que tenemos que desarrollar. El juez reconoció que esto tiene una trama compleja, con una pluralidad de participantes que tuvieron que ser reconocidos por diferentes sucesos probatorios, dos de ellos se encuentran prófugos, todos esos elementos los valoró».

«Cabrera no modificó su rutina desde el día uno, como si lo hizo Reifenstuel, continuó trabajando en el club Social Lux. El punto de inflexión es cuando se dan a conocer los videos, donde notamos el cambio total (físico, de lugar de residencia, rutina). Se sintió acorralado, su cara y su nombre estaban en todos los medios públicos, no podía ir al trabajo ni estar con su familia, y decidió presentarse», agregó sobre el tiempo que tardó el detenido en entregarse.

Respecto al rol que tuvo Cabrera en el ataque, consideró: «Nosotros sostenemos que los tres ocupan el mismo rol, todos caminaron 25 cuadras desde el lugar donde vieron el partido para llegar hasta la cancha de Newell’s, entendemos que lo hicieron con un motivo. Cuando llegaron a Montevideo y Lagos y vieron pasar a gente de Central, los tres agarraron piedras y los tres se las lanzaron a una persona que venía en moto en movimiento. Entendemos que los tres son culpables del homicidio de Ivana, en las mismas características, sin perjuicio de que la piedra que impactó en el cráneo la haya lanzado uno u otro».

En torno a si hay datos sobre el tercer sospechoso involucrado, informó: «Tenemos elementos para llegar a una identificación pronto, estamos trabajando en eso, pero no queremos adelantar ni perder la posibilidad de llegar a esa persona. No queremos otra persona prófuga, lo estamos manejando con cautela».

En relación al origen de la linga que se observó en el material compartido, en el que se ve como Cabrera la tira, agregó: «La linga la portaba la pareja de la víctima. Cabrera fue el único de los tres sospechosos que, luego de la agresión con piedras, decide ir a atacar al novio de la víctima, y lo hace porque el mismo frena la moto para ir a socorrer a su pareja, no para trenzarse en lucha. Se ve que interpretó en modo contrario, lo fue a atacar. En este caso Daniel (pareja de Ivana) se defendió con la linga, en ese forcejeo Cabrera se la llevó y la descartó como se ve en el video».

Respecto a novedades sobre Damián Reifenstuel, indicó: «Sabemos que no pasó por un paso migratorio custodiado por Argentina, pero tenemos información fehaciente de que es probable que haya cruzado desde la localidad de Salvador Mazza (una localidad del extremo norte de Argentina, en la provincia de Salta) a Bolivia. De hecho, ya tenemos un pedido de alerta roja de Interpol, de detención y captura internacional. Hemos alertado a las autoridades de ese país, estamos solicitando la cooperación internacional para poder dar con la captura de esta persona. Lo habría hecho hace diez días, antes de que se viralizaran las imágenes».