Un joven rosarino vinculado a la narcobanda «Los Monos», que se encuentra detenido, y su novia -también presa- fueron imputados este miércoles como los presuntos ideólogos de una balacera contra una oficina del Servicio Penitenciario, ubicada en Alsina 1698 de Rosario, y las amenazas por redes sociales a un empleado de esa dependencia.

Los dos imputados fueron identificados como Pablo Nicolás C., un joven procesado como miembro de una célula narco que actuaba bajo las órdenes del jefe de «Los Monos», y su novia Melisa Samanta N., detenida por un doble homicidio, añadieron las fuentes.

El fiscal de la Unidad de Balaceras de Rosario, Pablo Socca, acusó este miércoles a ambos durante una audiencia imputativa en el Centro de Justicia Penal (CJP), de Rosario, ubicado en Sarmiento y Virasoro, de ser los presuntos planificadores del ataque al Servicio Penitenciario.

Tras escuchar los cargos y la presentación de la evidencia, la jueza Verónica Lamas González les dictó la prisión preventiva por el plazo de dos años, detallaron voceros del Ministerio Público de la Acusación (MPA) santafesino.

Socca acusó a Nicolás C. de planificar desde el pabellón de presos de alto perfil de la cárcel santafesina de Coronda la balacera contra la Delegación Sur Unidad 8 Asuntos Internos del Servicio Penitenciario, ubicada en calle Alsina al 1600 de Rosario.

El ataque

La balacera ocurrió el 10 de mayo pasado, cuando pasadas las 15 dos hombres en moto se detuvieron en el lugar y uno de ellos realizó cinco disparos contra la puerta del inmueble, según la investigación.

Antes de escapar, dejaron un cartel escrito a mano sobre una hoja de papel que decía: «Para Centurión: dejá de verdugiar (sic) a los alto perfil. La mafia.»

Para el fiscal, «las intimidaciones se realizaron con el objeto de amedrentar a dicho personal a fin de obtener concesiones y/o privilegios en el trato y en el régimen establecido para su custodia» en la cárcel.

Pero también se realizaron «para infundir temor público generando mayor alarma social en la comunidad y en todos los guardias del Servicio Penitenciario de la provincia de Santa Fe», consideró.

Por otra parte, el fiscal Socca acusó a Nicolás C. y a su novia de «haber proferido amenazas de muerte y de atentar contra la integridad física y la de su familia» de un empleado del Servicio Penitenciario de la cárcel de Coronda.

De acuerdo con la investigación, el 20 de junio pasado «un usuario de la red social Facebook que utilizaba dicho interno (por Nicolás C.) le envió a la víctima a su Facebook personal capturas de pantalla con fotografías personales y una imagen de la base de datos llamada Nosis, conteniendo información de la víctima adjunto a un mensaje intimidante», informó el MPA.

El fiscal sostuvo que los datos de la base los obtuvo Melisa N., quien se los pasó a su novio.

La mujer, de 35 años, está detenida desde fines de septiembre último tras ser imputada por su presunta participación en el doble crimen de dos hermanas, Estefanía y Marianela Gorosito, cuyos cuerpos fueron encontrados baleados el 20 de julio en un camino rural de las afueras de Rosario.

Mientras que Nicolás C. cumple una condena unificada a 24 años de prisión por dos homicidios, fue imputado en febrero de este año como jefe de una célula dirigida desde la cárcel por el jefe de «Los Monos», Ariel «Guille» Cantero, y procesado en la Justicia federal por comercio de estupefacientes.

Ahora el fiscal Socca lo imputó por amenazas coactivas doblemente calificadas, en concurso ideal con intimidación pública, precisaron las fuentes.