La llegada de River a la ciudad, con motivo a disputar su partido contra Rosario Central hoy a las 21.15, tuvo su punto de complicación más alto en la noche de ayer, y derivó en piedrazos, balas de goma, personal policial herido y un hombre de 39 años detenido.

Todo comenzó anoche cuando gran cantidad de personas de la parcialidad de River Plate se dirigió al hotel Ros Tower, donde se alojaban los jugadores del plantel, para tener contacto con los mismos.

Cuando el micro arribó al hotel, entre 700 y 1.000 hinchas se abalanzaron contra el colectivo para sacar fotos y obtener firmas de los jugadores, provocando la intervención policial, que buscaba que los hinchas retrocedieran y se calmaran.

Lejos de  tratarse de un acercamiento civilizado, todo desbordó y terminó en un hecho de violencia y tensión. Los simpatizantes del club porteño empezaron a arrojar piedras, botellas y hasta baldosas al personal policial que intentaba detenerlos.

Ya con los jugadores riverplatenses dentro del hotel, comenzó la represión que derivó en balazos de goma y piedrazos. El saldo del altercado, que duró aproximadamente veinte minutos, fue varios vidrios del alojamiento rotos, dos policías y varios hinchas heridos -nada de gravedad- y un hombre de 39 años detenido, quien fue trasladado a la comisaría 3ª y quedó a disposición de la Justicia.