Restos de sangre de Blas Cinalli, uno de los rugbiers detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa, fueron hallados bajo las uñas de la víctima como conclusión de estudios de ADN, cuyos resultados se dieron a conocer recientemente.

Además, se encontraron rastros de la sangre del joven asesinado en el 70 por ciento de prendas de vestir que se secuestraron en el momento en el que se allanó la vivienda de la localidad de Villa Gesell que alquilaban los sospechosos.

Los resultados podrían agravar la situación de Cinalli, actualmente detenido como partícipe necesario del asesinato cometido el 18 de enero último frente a la sede de la disco Le Brique, de esa localidad balnearia.

También podrían complicar a Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi, los dos únicos del grupo que habían recuperado la libertad.

Bajo las uñas del cuerpo de Báez Sosa también se encontró otro tipo de sangre que podría pertenecer a Máximo Thomsen, quien ya se encuentra imputado como coautor de «homicidio agravado» junto a Ciro Pertossi, indicaron fuentes judiciales.

Las novedades se conocen a pocas horas de que la Cámara de Casación Penal de Dolores rechazara el pedido de libertad condicional para los ocho detenidos y la recusación de la fiscal del caso, Verónica Zamboni.

Los jueces Luis Defelitto, Susana Darling Yaltone y Fernando Sotelo consideraron que el crimen fue «una cacería humana».

Defellito destacó «la falta de nerviosismo, la actitud normal nos demuestra que son personas frías y calculadoras» en cuanto a los autores del crimen.

«Si formé parte del grupo que atacó a la víctima y mi intención solo hubiese sido golpearla ¿no hubiese respondido, por ejemplo: ¿qué?, ¿cómo?, ¿me estás cargando? o frases similares. Nada de ello ocurrió», destacó el magistrado al desplegar los fundamentos.

Tras el dictamen de la Cámara, que desestimó una serie de pedidos del abogado defensor Luis Tomei, los rugbiers Máximo Thomsen; Luciano, Ciro y Lucas Pertossi, Tomás Enzo Comelli, Ayrton Michael Viollaz, Blas Cinalli y Matías Benicelli, actualmente confinados en la Alcaldía de Melchor Romero, esperarán el juicio oral en prisión.