Este sábado la tragedia cayó, inexorable, sobre la familia Espíndola, cuando la joven policía de 25 años, Lourdes Espíndola, fue baleada en el cuello durante un intento de robo en Ituzaingó. Horas después, el domingo, se dio a conocer que la joven presentaba un estado irreversible de muerte cerebral.

En medio de la conmoción que generó lo ocurrido, el padre de la joven hizo desoladoras declaraciones en los medios. Juan Espíndola, relató: «Es un momento duro, muy difícil. Y lo de Lourdes justo me agarró con un tema complicado, aseguró el hombre de 53 años al relatar la dramática situación que vive la familia.

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«El miércoles fui a trabajar y me dan la noticia de que el viernes se cierra la empresa y me quedé sin trabajo después de 16 años de trabajar en ese lugar». «Y después, este balde de agua fría que se me viene ahora, es muy duro«, se lamentó el hombre en declaraciones a radio La Red.

Juan Espíndola contó que ser policía era un sueño que tenía Lourdes desde muy pequeña. «Nunca pudimos sacarle eso de su cabeza Era su decisión y había que respetarla», afirmó el hombre.

Espíndola también habló sobre su nieto, Juan Ignacio Ledesma Espíndola, de apenas 6 años. Y aseguró que van a compartir el cuidado con el padre del niño, que estaba separado de Lourdes. «Yo ahora necesito un trabajo, algo. Ahora me pasó todo esto y yo tengo que cuidar de mi nieto, tengo que abastecerlo», señaló.

Juan Espíndola también aseguró que, hasta el momento, no hubo ningún representante del Gobierno de la provincia de Buenos Aires que se acercara a darle algún apoyo. «El único que lo hizo fue el intendente de Berazategui, Patricio Mussi». En esa localidad vivía la joven junto a su pareja, Fernando Altamirano.