Este viernes, tras una semana de fuertes movidas judiciales y mediáticos allanamientos, finalmente le llegó la hora a Andrés Bracamonte, jefe de la barra brava de Rosario Central. Tras dos extensas audiencias imputativas, la jueza de Primera Instancia, Valeria Pedrana resolvió que la causa se tramite en la Justicia Provincial y que Pillín espere el proceso oral en prisión.

El fiscal Miguel Moreno imputó al líder barrabrava por el delito de lavado de activos agravado por realizarse con habitualidad en calidad de autor y la magistrada aceptó dicha imputación y atendió al pedido de prisión preventiva ya que, como señaló Moreno, Bracamonte representaba dos peligros procesales ciertos para la causa: «el entorpecimiento probatorio y el peligro de fuga».

Al término de la audiencia imputativa y en diálogo con la prensa, Moreno dejó entrever que habrá más imputados en la causa, probablemente la personas que administran sus bienes, su ex mujer y su hijo.

Millonarias operaciones

El fiscal Miguel Moreno realizó un exhaustivo detalle de los bienes y empresas que Bracamonte posee, señalando además que «Rosario Central era la materia prima» de su enriquecimiento. A día de hoy, el patrimonio de Pillín supera los 38.000.000 de pesos.

El funcionario judicial, que confirmó que la pena en expectativa para este delito es de 4 a 13 años de prisión efectiva, consideró además que Central resultó perjudicado de hecho ya que, según su apreciación, el patrimonio de Bracamonte y de sus personas allegadas está construido en función de perjudicar al club y a los negocios que le llegaban del club.

Durante la audiencia, Moreno puntualizó que, para que esos bienes adquieran la apariencia de origen lícito, «Pillín» realizó diversas maniobras, utilizando a personas de su confianza como presta nombres y administradores y creando, adquiriendo y utilizando sociedades comerciales a través de las cuales puso en circulación bienes provenientes de presuntos ilicitos como amenazas, extorsiones, y maniobras defraudatorias.

A nombre de uno de éstos terceros, Natalia S., ex pareja de Bracamonte, se registra actividad desde noviembre del 2013 en Servicios de Transporte Automotor de Pasajeros mediante taxis y remises, alquiler de autos; y desde mayo del 2017 registra alta de actividad en Servicios Inmobiliarios realizados por cuenta propia, con bienes urbanos propios o arrendados, asimismo se registró a uno de ellos como trabajadora autónoma con ingresos brutos anuales mayores a $20.000 desde junio del 2013.

En la acusación se detallan algunas de las operaciones realizadas por Natalia S. Por ejemplo, entre mayo de 2012 y enero de 2013, la mujer compró 3 departamentos del edificio “Altos Alberdi”, por un monto de 155 mil dólares. Asimismo a su nombre fueron hechas las adquisiciones de los automóviles secuestrados en el allanamiento realizado el día 22 de junio de 2020 en calle Alvarez Thomas 1800 de la de Rosario. Allí fueron encontrados un Renault Logan, adquirido en enero de 2010 y valuado en $238,500 , un Chevrolet Classic, comprado en julio de 2012 y un Chevrolet Cobalt 1.8N LT valuado en $644.700, autorizados a funcionar como taxi.

Además, había un BMW 125 I valuado en $1.656.000 pesos y un Mini Cooper, valuado en 1.653.900 cuya titular es la madre de Natalia S. quien también posee dos licencias de taxi a su nombre.

Otros rodados fueron hallados en el domicilio de esta mujer: una motocicleta XTZ250 sin dominio, una motocicleta Yamaha YZ 85cc sin dominio, un Cuatriciclo Yamaha Raptor 700, y otros automotores que están a su nombre y no fueron secuestrados.

Otra de las personas en las que se apoyó «Pillín» para registrar sus bienes es su hijo, quien registra recibos de sueldo emitidos por “Dragados y Obras Portuarias S.A., con domicilio en 3 de Febrero 2700, de Buenos Aires, por el monto de $25.589,25 pesos.

El joven Bracamonte es titular de dos vehículos, que funcionan también como taxis, un Chevrolet Prisma valuado en $576.400 pesos adquirido en agosto de 2019 y un Chevrolet Classi comprado en febrero de 2020. Además, en septiembre de 2017 compró un VW Scirocco valuado en $820.000

Según explicó Moreno, del análisis de la documentación y los datos recabados se advierte que no existiría correlato entre los montos erogados entre el 1º de enero de 2019 y el 30 de marzo de 2020 estimados en concepto de adquisición de rodados, que ascendió a la suma de $876.400 pesos, los importes disponibles en efectivo al al 31 de diciembre 2018 ($ 133.119 + U$S 2.500), y las sumas recaudadas conforme la certificación de ingresos del 09/2019-03/2020 ($ 489.000).

Además, en ocasión de adquirir el rodado de Vw Scirocco  no tenía registrada actividad que le permitiese adquirir el mismo, puesto que el alta como contribuyente data de fecha 06/2018, mientras la fecha de inicio de la relación de dependencia el 17/09/2018,

En virtud de todo esto es que la Acusación sostiene que Andrés Bracamonte hijo oficia de admistrador de los bienes mencionados que en realidad fueron adquiridos con bienes de su padre.

Las sociedades

Más allá de su actividad reconocida como líder de la barra brava canalla parece que «Pillín» tenía una gran capacidad empresarial. De acuerdo a lo investigado, Bracamonte es propietario de cuatro empresas Vanefra S.R.L , SER -ECO, Ruffino S.A.S. y Kabrasi.

En relación a Vanefra, fue constituida en abril de 2017 con un capital social de 500 mil pesos integrada por partes iguales por dos socios y Bracamonte figura como uno de ellos. Su objeto social es “Servicio de limpieza y conservación de todo tipo de inmuebles e instalaciones comerciales e industriales y sus dependencias. Construcción, reforma, reparación y mantenimiento de edificios residenciales y no residenciales”,  sufriendo una modificación del objeto social donde se agrega la actividad “Alquiler de baños químicos y de baños portátiles, tanto para espacios públicos como para espacios privados”.

Vanefra SRL registra a su nombre: un automóvil BMW M2 modelo 2018, con valor de mercado aproximado de $4.471.200, que fue secuestrado en el domicilio del barrio privado “Los Alamos”; una moto de agua marca SEA DOO modelo GTR 230, comprada por el valor de $836mil pesos en noviembre de 2019 donde el socio gerente de Vanefra firmó contrato con una guardería náutica cediendo derechos de uso de un espacio de guarda para la embarcación mencionada, siendo que se advierte que las únicas personas autorizadas a utilizar la embarcación son Bracamonte y su hijo (dicha embarcación fue secuestrada en fecha 22 de junio de 2020 en allanamientos múltiples en el marco de la investigación realizada).

En el allanamiento realizado en el domicilio del socio, en Chaco 300 de Granadero Baigorria, se procedió al secuestro de dos camionetas VW Amarok, una valuada en $1.351.200 y la segunda por un valor de $2.250.000, ambas registradas a nombre de “Vanefra S.R.L.”. Se procedió al secuestro de una moto Kawasaki 948/950CC Z ABS valuada en $1.886.100 pesos cuyo titular es la pareja de dicho socio, quien cuenta con autorización para conducirla.

Además de bienes de lujo, Pillín maneja grandes cantidades de dinero que no encuentran correlato con la actividad comercial que dice tener. En fecha 8 de abril de 2020 (primer allanamiento realizado en Club de Campo “Los Alamos” de la localidad de Ibarlucea), se procedió al secuestro de dinero en efectivo por $2.554.610, U$s 2844 dólares y valores por $ 841.402,65 pesos.

Para justificar esas sumas, el imputado presentó dos estados contables de la empresa Vanefra, en los cuales se certificó que sus ingresos ascienden a $1.970.500 pesos correspondientes al período del 1/4/19 al 31/3/20, de su actividad de venta de indumentaria deportiva, ropa e implementos de seguridad, servicio de limpieza y mantenimiento en general, alquiler de baños químicos, servicios empresariales en general; y que los ingresos de otra persona de su círculo familiar asciende a $489.000 correspondientes al período 1/9/19 al 31/3/20, de su actividad de servicios de transporte automotor de pasajeros mediante taxis.

Así, se estima que no surge correlato entre la actividad declarada de Vanefra SRL, los bienes de uso activados y los costos informados. De las cifras giradas por la empresa corresponden al 50% de las ganancias obtenidas en el ejercicio precedente (18/7/2019 a 31/3/20).

En relación a los estados contables al 30/06/2019, Bracamonte declara activos por $ 6.231.903,63, registra activación de rodados por $ 4.151.571,60 lo que guardaría correlato con los vehículos identificados del relevamiento, no obstante, no se advierten otros activos vinculados a sus actividades principales. Así se sostiene que Vanefra SRL es utilizada para demostrar una actividad y un giro comercial que en la realidad no se advierte.

En el allanamiento de calle Avenida San Lorenzo 100, de Capitán Bermúdez, no se encontró ningún rastro o indicio vinculado a las actividades que se describen en su objeto social, por el contrario, en dicha dirección funciona una concesionaria de autos de nombre “Yannantuoni”.

En fecha 27 de Junio de 2018, el líder barrabrava y otro socio adquirieron la empresa SER-ECO SRL comprándosela a otras personas que cedieron a valor nominal y transfirieron sin reserva la totalidad de las 12.000 cuotas de capital de $ 10 pesos cada una. Sin embargo, en el allanamiento realizado el pasado lunes en Paraná al 100 de Capitán Bermúdez, en la sede registrada de la firma, cuyo objeto social es el alquiler de baños químicos, se dio cuenta que no existe rastro de la actividad declarada y por el contrario, se constató la existencia de un Gimnasio de nombre Atlantic Gym, que pertenecería al socio de Pillín.

Ruffino S.A.S.

En julio de 2019, Andrés Bracamonte registró la constitución de otra firma comercial, Ruffino S.A.S., teniendo esta vez como socio al intendente del Estado del Club Atlético Rosario Central, Sergio Quiroga. El objeto social de esta nueva empresa abarca desde la fabricación comprende desde la , comercialización, distribución, importación y exportación al por mayor y menor de indumentaria de ropa deportiva, calzados, prendas y accesorios de vestir hasta actividades comoconstrucción, reformas y reparación de edificios residenciales y no residenciales, incluyendo viviendas unifamiliares, multifamiliares, departamentos, albergues, restaurantes, bares, bancos, oficinas y locales comerciales e instituciones deportivas. Además, incluye servicio de organización de convenciones, exposiciones comerciales, festivales, espectáculos, shows, galas, ceremonias y desfiles, incluyendo los culturales y deportivos.

Al igual que en las otras dos empresas en la constatación y posterior allanamiento no se evidenció ningún rasgo distintivo que haga alusión a la empresa ni a ninguna de las numerosas actividades que comprende el objeto social. Se procedió al secuestro de un rodado sin chapa patente que registraba pedido de secuestro activo en marzo de 2015 en virtud de haber sido sustraído en un hecho de robo calificado.

De la facturación de Ruffino SAS durante el semestre septiembre 2019 –  febrero 2020, las ventas informadas totalizan $ 925.890 pesos siendo que el 87% de esas ventas, es decir $ 805.690, fueron facturados a nombre de un único cliente, que es el Club Atlético Rosario Central.

En tanto, en el  período abril 2019 – agosto 2019, Bracamonte registra facturas emitidas en carácter de monotributista, las que están dirigidas en su totalidad al Club Rosario Central por un total de $465.570, en concepto de ventas de mates y bombillas, vasos de vidrio e indumentaria deportiva. Sin embargo, durante el allanamiento realizado en la sede de calle Mitre del Club Rosario Central, la contadora informó que las facturas presentadas por «Pillín» en carácter de monotributista fueron rechazadas por carecer de las formalidades exigidas.

Ademas, de la información proporcionada por la Administración Federal de Ingresos Públicos, surge que el líder barrabrava no registra compras informadas por indumentaria deportiva, uniformes, botines ni relacionados. Es decir, no existe compra de los bienes que afirma comerciar y vender.

Por otra parte, el fiscal Moreno hizo notar que «Pillín» oficia como líder de la barrabrava del club y a la vez como supuesto proveedor de indumentaria y artículos como vasos y mates, en primer lugar emitiendo facturas de forma directa como monotributista y luego desde Ruffino S.A.S junto al intendente del Estadio. Tanto así que se secuestran cheques emitidos por el Club Atlético Rosario Central dirigidos a Vanefra S.R.L por el valor de $36.100 pesos y a Ruffino S.A.S por el valor de $115.272,65 pesos. Asimismo se encontró un tercer cheque emitido por Rosario Central por el valor de $660.030 pesos, esta vez, dirigido a Jorge Bilicich quien se dedica a la representación de jugadores de fútbol.

Con este detalle como muestra de una trama compleja y mucho más profunda de lo que aparenta, Moreno planteó a la jueza la discordancia existente entre el respado de sus actividades comerciales y el verdadero origen de los bienes que dispone. A la vez trazó una línea vinculatoria con los delitos de amenazas coactivas contra el personal del Club Rosario Central,  hecho por el que fue condenado en diciembre de 2009 a 2 años de prisión efectiva con su evidente influencia y poder dentro del club y la utilización de sus empresas para adquirir bienes de lujo y transferir a su cuenta grandes sumas de dinero con la supuesta facturación de ventas que resultan, al menos, sospechosas.