El intendente de Paraná (Cambiemos), Sergio Varisco, aseguró hoy que se someterá a «todas las preguntas» en su indagatoria del martes próximo, en el marco de una causa por narcotráfico en la que fue imputado por la Justicia Federal entrerriana.

«Me parece bien que el juez, dentro de su órbita y su competencia, quiera investigar todo, nosotros creemos que esto demuestra que hay un Poder Judicial independiente.

Es mi obligación y mi deber, me someteré a todas las preguntas», expresó el jefe comunal de Paraná en diálogo con la señal de noticias TN.

Varisco aseguró que no tiene «absolutamente nada que ver con ninguna red de narcotraficantes ni nada parecido» y dijo que lo citaron en la causa «porque hace un año y medio aproximadamente se descubrió una avioneta con estupefacientes y estaban involucrados algunos empleados municipales».

«Nosotros estamos muy tranquilos porque obviamente no tenemos nada que ver y nos someteremos el martes a la indagatoria. Hoy voy a nombrar a mis abogados y veremos la estrategia judicial a llevar adelante, que fundamentalmente es abrir el municipio y nuestros domicilios (…) no tenemos nada que ocultar», agregó.

La indagatoria del intendente fue resuelta ayer por el juez federal Leandro Ríos, quien además interrogará en el marco del mismo expediente al concejal (Cambiemos) Pablo Hernández y la funcionaria de Seguridad de la municipalidad Griselda Bordeira.

La decisión adoptada por el juez se tomó pocos días después de que se allanaran los domicilios de los tres funcionarios en el marco de una causa en la que se investiga su presunta vinculación con una organización dedicada a la comercialización de estupefacientes, cuyos sindicados líderes están presos.

La semana pasada, el juez Ríos ordenó allanar el despacho del intendente, su vivienda particular y la de su madre.

Tras esos procedimientos, los abogados de Varisco, Walter Rolandelli y Rubén Pagliotto, aseguraron a la prensa que no se había hallado nada relevante para la causa, mientras que el propio intendente brindó una conferencia de prensa en la que dijo estar «tranquilo» y a «disposición de la Justicia».

Los allanamientos y las imputaciones se llevaron a cabo en el marco de un expediente por narcotráfico iniciado en mayo del año pasado, tras el hallazgo de una avioneta con 317 kilos de marihuana en un campo de Colonia Avellaneda, cerca de Paraná.

Como líder de esa organización fue detenido también el año pasado Daniel «Tavi» Celis, mientras que su esposa, Luciana Lemos, fue apresada días atrás en Paraná, acusada de comercializar drogas en su domicilio de la calle República de Siria, de la capital provincial.

Las detenciones siguieron a una investigación que incluyó escuchas telefónicas y mediante las cuales los pesquisas determinaron que Celis desde prisión coordinó operaciones de narcotráfico y comercialización de unos diez kilos de cocaína.

Los voceros informaron que la droga que negociaba Celis desde la prisión provenía de Buenos Aires y que iba a ser entregada a Lemos y otras personas de su entorno, entre ellas, a un hermano de Celis, apodado «Cholo» Celis; a un sobrino identificado como Nacho Gómez y a una tercera persona de nacionalidad peruana.

Luego de ese operativo, el juzgado de Ejecución de Penas de Paraná dispuso que Celis sea derivado de la penitenciaría de Paraná a una unidad externa del servicio federal de Entre Ríos.