Tiziano Gravier, uno de los hijos de Valeria Mazza, fue golpeado días por dos desconocidos en la puerta de un boliche de Pichincha y sufrió una fractura de mandíbula.
Según el relato que hizo su abogado, Germán Pugnaloni, el joven de 20 años y su hermano Benicio fueron a una disco y había coordinado para encontrarse con unas amigas en la puerta del boliche ubicado en Avenida Francia y Brown.
Este viernes sus agresores, cuyas iniciales son J. M. y a F. Z., fueron imputados por el delito de Lesiones graves dolosas mediando acto discriminatorio por la condición social, posición económica o carácter físico, en calidad de autores. Además, se les dictó prisión preventiva efectiva por el plazo de 90 días.
>Te puede interesar: Pichincha: agredieron al hijo de Valeria Mazza y le fracturaron la mandíbula
La Fiscalía le atribuyó el hecho ocurrido en fecha 5 de Junio de 2022, aproximadamente las 5:10, en inmediaciones de la intersección de calles Brown y Vera Mújica. En ese momento, Tiziano se encontraba con su hermano Benicio y otras dos personas, cuando los imputados lo provocaron llamándole “tincho”.
Tras lo cual, los jóvenes lo agredieron con un golpe de puño cada uno en la cara. La víctima sufrió lesiones graves, constatadas mediante historia clínica del Sanatorio Británico.
Toda la secuencia quedó grabada en un video de seguridad, que la Fiscalía tomó como una de las pruebas, además de testimonios de testigos. Finalmente, los acusados fueron detenidos en sede del Centro de Justicia Penal en fecha 8 de junio de 2022 a las 14.15.
Sobre la decisión del juez Hernán Postma de dictar prisión preventiva, el fiscal Rodrigo Santana de la Unidad de Flagrancia, comentó: “La decisión creo que es ajustada a derecho, es lo que pedimos. Había peligro de fuga, pena en expectativa y gravedad del hecho, por eso se determinó la prisión preventiva. Van a ir 90 días presos, es de prisión efectiva”.
En cuanto al acto discriminatorio previo a la agresión, remarcó: “Toda forma de discriminación es repudiable, parte de lo sucedido en este hecho tiene una connotación de provocación, que agrava la magnitud del hecho”.
Por último, contó que los acusados “pidieron disculpas y se mostraron arrepentidos”.
