Tras una investigación realizada por la Gendarmería Nacional, la División Antidrogas de la Agencia de Investigación Criminal y la Policía de Santa Fe, se logró desbaratar a una organización narcocriminal que operaba en Rosario, Casilda, Chabás y Sanford. Las fuerzas de seguridad realizaron un total de 19 allanamientos en los cuales fueron detenidas 10 personas, entre ellos, el subjefe de la comisaría de Chabás.
Los procedimientos, ordenados por el juez federal Carlos Vera Barros en el marco de una causa instruida por el fiscal Claudio Kishimoto, buscaban material probatorio sobre una estructura narcocriminal que distribuía drogas en distintos puntos de venta. En la ciudad de Casilda se desplegaron 14 allanamientos, 3 en Chabás y 1 en Rosario, en el hipódromo. Además, hubo un medida en un stud de Sanford. Una de las hipótesis que manejan los investigadores es que la organización lavaba dinero comprando caballos de carrera.
Entre los detenidos se encuentra el subinspector de la policía santafesina, Mauricio Fernando Z. subjefe de la subcomisaría 4ª de Chabás, domiciliado en Casilda. En al allanamiento de su domicilio se incautaron dos teléfonos celulares, una notebook, varios pendrives, 15.000 pesos en efectivo y unas pocas plantas de marihuana. También en Casilda fue apresado un abogado, identificado como Gastón Sebastián R.
El resto de los detenidos son Benjamín Daniel L., Carlos Orlando L., Julio César R., Lucas Javier C., Nelson Daniel A., Rocío Soledad C., Andrea S. y Brian Eduardo A. Todos serán indagados por Vera Barros.
En los procedimientos también se secuestraron documentos (boletos, recibos de compra venta, cedulas, títulos, registros de propiedad) para el lavado de activos. Además se incautaron 11 vehículos, 2 caballos pura sangre, 5 armas de fuego, 525 gramos de cocaína fraccionada en “bochitas” listas para comercializar, 546 gramos de marihuana, seis balanzas de precisión, 703.180 pesos argentinos, 557 dólares, 34 teléfonos celulares junto a otros elementos electrónicos fueron secuestrados en la redada
Por otra parte, y por orden del Juzgado Federal N° 3 el personal del Grupo de Investigaciones Patrimoniales, Financieras de Gendarmería, la AIC y la Policía provincial, avanzaron sobre una red delictiva que poseía como sustento económico la venta de estupefacientes, vinculada a una cadena de personas encargadas de “lavar” el dinero obtenido para reinsertarlo nuevamente al circuito económico legal por medio de carreras de caballos, comercios, alquileres, autos, restaurantes, entre otros, señalaron voceros judiciales.
