por Florencia Vizzi
«Hace un año que venimos luchando, fueron más de 10 audiencias pero finalmente lo conseguimos, el policía Alejandro Bustos vuelve a prisión». Al relatar esta novedad, se percibe un marcado tono de alivio en la voz de Germán, hermano de David Campos, brutalmente ejecutado por la policía junto a su amigo Emanuel Medina en medio de una inexplicable persecución policial. Este lunes por la tarde se realizó la última audiencia preliminar del juicio que llevará al banquillo de los acusados a 19 policías. En la misma, el juez Hernán Postma resolvió que Bustos, uno de los principales responsables del doble fusilamiento, no es inimputable y deberá volver a prisión.
La madrugada del 23 de junio de 2017, Emanuel Medina y David Campos volvían a sus casas después de haber ido a bailar. Por razones que nunca fueron realmente aclaradas, comenzó una persecución policial que atravesó la ciudad y que tuvo su trágico final en Cazadores y Callao, cuando el Volkswagen Up en el que iban los dos jóvenes terminó estrellándose contra un árbol. Los policías que los perseguían abrieron fuego a mansalva sobre los dos jóvenes, que estaban desarmados, y los acribillaron a sangre fría. Emanuel recibió nueve disparos y David cinco.
Luego de una ardua y espinoza investigación, se logró establecer que las balas partieron desde las armas de Emiliano Mendoza y Alejandro Bustos y hubo otros 17 policías que se encargaron de plantar pruebas falsas y encubrir el doble crimen. Todos ellos enfrentarán un proceso oral que probablemente llegue el año próximo. Los dos primeros, por los cargos de homicidio calificado y el resto por encubrimiento e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Fin de una etapa
La familia de ambas víctimas atravesaron decenas de audiencias judiciales hasta que lograron que los responsables del doble crimen fueran identificados y acusados. Finalmente, este lunes se llevó a cabo la última audiencia preliminar antes del proceso oral. En la misma debía definirse un punto álgido de la causa: la situación de Alejandro Bustos, quien disparó siete veces contra Emanuel Medina, que pretendía ser declarado inimputable y que desde hace un año permanece internado en un pisquiátrico.
Según la defensa de Bustos, el policía habría actuado con la presión de un estres post traumático por la muerte de un colega en un enfrentamiento hace más de diez años.
Sin embargo, las querellas y lo Fiscalía, convencidos de que se trataba de una estrategia para eludir la responsabilidad en el crimen, antepusieron recursos y solicitaron la intervención de varios peritos de partes.
«Logramos desmentir esta falacia de la defensa del oficial Bustos que quería declararlo inimputable y que siga internado. Por suerte logramos demostrar que eso era falso. Más de 10 peritos pasaron por la audiencia preliminar y, finalmente, el juez Postma determinó que no es inimputable y que tiene que estar preso y no internado. Hace un año que estamos peleando por esto», explicó Germán Campos a Conclusión.
Con esta resolución de Postma se puso un punto final a las etapa de la investigación preliminar preparatoria y ahora toca esperar que llegue el juicio propiamente dicho.
En ese sentido, el hermano de David Campos se mostró satisfecho con la forma en que se encaminó la investigación. » Van a juicio la mayoría de los oficiales que estaban investigados en un principio. Estamos conformes con la investigación que hizo la Fiscalía y la que hicimos nosotros como familia y nuestros abogados».
«La verdad es que fueron dos años y medios larguísimos. Nuestras vidas cambiaron totalmente. Se extrañan los pibes a cada instante, a cada momento los recordamos y los tenemos presentes. Todo esto fue un proceso muy largo y esperamos mucho. Con esto de Bustos hemos tenido más de 10 audiencias para demostrar que él estaba simulando, que no era inimputable y que tenía que volver a la cárcel. Nos llevó todo un año lograr que vuelva a prisión. Pero nosotros tuvimos nuestros peritos de parte y la fiscalía tuvo sus peritos de parte y pudimos revertir la situación… y hoy en día se festeja como un triunfo, aunque no lo es, todavía falta mucho para la sentencia, pero fue la primera noche en un año que pudimos descansar bien».
