Vecinos y ambientalistas de la ciudad santafesina de Casilda denuncian detenciones y represión contra el acampe que mantenían para frenar la construcción de la nueva sede de los Tribunales Provinciales en el Parque Sarmiento, un espacio identificado como un pulmón verde único en el territorio.

«Hay cinco detenidos y dos personas están en el hospital. Hubo represión con gases», alertó en el mediodía de este viernes ante Conclusión Luciana Luraschi, integrante de la Asamblea Casilda, la organización que encabeza las acciones en defensa del ecosistema del Parque Sarmiento.

Este medio habló con la referente de la Asamblea minutos antes de que sucedieran las detenciones. Al cortar la comunicación, los ambientalistas estaban realizando un abrazo a un árbol centenario de los que quedó en pie en el predio. Según contó Luraschi en un segundo contacto, al poco tiempo, los efectivos policiales regresaron al lugar y comenzó la represión.

Una mañana sin paz

En el primer diálogo que tuvo con Conclusión la integrante de la Asamblea Casilda, contó que cerca de las 6 de la mañana de este viernes arribó a la zona del acampe un grupo de efectivos policiales dispuestos a desalojarlos para permitir el avance de la obra.

«A las 6 de la mañana vinieron las fuerzas de choque y se llevaron a dos compañeros detenidos: una compañera que fue tomada por varones y otro que fue golpeado. Cuando llegamos los que no estábamos haciendo turno del acampe, no sabíamos donde estaban. Al rato nos enteramos de que estaban en la comisaría», repasó Luraschi.

Una vez que pudieron sacar a parte de los manifestantes, los encargados de la remoción del arbolado comenzaron a trabajar en el Parque Sarmiento. «Arrasaron con todo el arbolado del perímetro. Es un flagelo total en este marco de crisis climática. Tenemos una gran tristeza e impotencia», indicaron.

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«A media mañana, uno de los compañeros quiso entrar a hablar con uno de los operarios que tenía una motosierra y nuevamente los molieron a palos y los llevaron detenidos. Recién nos avisaron que salieron (de la comisaría)», reconstruyó Luraschi cerca del mediodía, cuando todavía no había avanzado la siguiente tanda de detenciones nombrada anteriormente.

Desde un inicio, los manifestantes aclararon que no se oponen a la construcción del nuevo edificio de los Tribunales Provinciales, pero sí sostienen que no es necesario arrasar con un ecosistema para poder erigir la obra.

«Nuestro lema desde el comienzo es ‘Tribunales sí, en el Parque no’. Entendemos que estas obras que traen mejoras a nivel social deben hacerse, pero no lesionando el artículo 41 de la Constitución que marca el derecho a un ambiente sano y equilibrado», plantearon.

En ese sector del Parque Sarmiento se planificó la construcción del que será el nuevo edificio de tribunales en Casilda, para las dependencias del Distrito Judicial 7, dentro de un lote de 3.650 metros cuadrados y con una superficie cubierta proyectada de 4.521 metros cuadrados repartidos en cuatro niveles y subsuelos.

Sin aval social

Según los manifestantes, ya cuentan con más de 14 mil firmas que exponen el descontento de la ciudadanía con la idea de perder un espacio verde que utilizan las familias y las infancias para poder disfrutar del aire libre.

Tal plantean, el edificio judicial que reconvertiría todo el predio podría construirse en otros lugares, pero «falta voluntad política» para buscar una alternativa que preserve el ambiente.

«Esto es un pulmón verde de nuestra localidad, el único. Es un ecosistema de humedales, el único lugar para afrontar estas temperaturas de 40º y esta ausencia de agua. La verdad que la situación es lamentable. Todo se hizo sin estudio de impacto ambiental, sin legislaciones en regla y con las autoridades judiciales siendo juez y parte, con conflictos de intereses. La frutilla del postre es esto, la remoción de los árboles en el perímetro del parque, que es un corredor biológico»,  remató Luraschi.