Por Andrea San Esteban
La violencia doméstica es un tipo de abuso que no sólo sucede dentro del hogar, sino que puede ser dentro de un vínculo. Las agresiones no son sólo físicas, sino que pueden ser emocionales, psicológicas, sexuales o económicas. De un cónyuge al otro, durante el noviazgo, o de un adulto a un niño, siempre hay una situación de vulnerabilidad de una de las partes. Hay muchas formas de agresiones, en cuanto a las emocionales o psicológicas,abarcan desde humillaciones, maltrato verbal, indiferencia, amenazas, gritos, malos gestos, cambios inesperados de conducta o intimidación.
Según la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, a nivel mundial casi el 50% de mujeres víctimas de homicidios fueron asesinadas por familiares o parejas, por sólo un 5% en comparación a los hombres; es por este motivo que se ha considerado a la violencia doméstica como una violación a los Derechos Humanos.
Las Naciones Unidas están utilizando el concepto “ejecución arbitraria”, que hace referencia a la capacidad de un atacante para invadir, a su antojo, la seguridad del otro. Este concepto se utiliza en el campo de la seguridad informática y hace referencia a la capacidad de un atacante para controlar comandos, inyectar un código en alguna aplicación, espiar o introducir virus, aprovechando alguna vulnerabilidad del atacado.
La violencia física puede ser sexual, golpes hasta quebradura de huesos o el asesinato, cuando es de género se denomina femicidios.
En un informe dado a conocer recientemente por el Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, se alertó a los gobiernos a utilizar el término Ejecución Arbitraria al abuso y femicidio.
Agnès S. Callamard es Relatora Especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias en la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) y se expresó sobre este tema: “De reconocer que los homicidios relacionados con el género, la violencia doméstica, los asesinatos por honor o los asesinatos de personas gay, lesbianas o transgénero, también pueden equivaler a ejecuciones arbitrarias”.
El informe también destaca el alto grado de violaciones a las mujeres discapacitadas, indígenas o transgénero. La falta de condiciones dignas de alimentación, acceso al agua o vivienda, también fueron consideradas una violación a los Derechos Humanos.
