Por Enrica Perucchietti
Desde el New York Times hasta el Financial Times , desde The Guardian hasta Süddeutsche Zeitung, los principales medios de comunicación internacionales miran con asombro el apretón asesino liberal de Italia , cuestionando la deriva autoritaria en nuestro país y la estabilidad de nuestra economía. En nombre de la seguridad, nuestro país es la primera democracia del mundo en cruzar el umbral de la libertad , imponiendo un pase de gobierno para poder trabajar.
Jason Horowitz para el NYT firmó un artículo sobre la entrada en vigor del Green Pass en el lugar de trabajo el 15 de octubre, subrayando cómo Italia ha establecido un nuevo límite para un país democrático:
«Al aprobar una ley radical que requiere que la fuerza laboral de toda la nación, pública y privada, tenga un pase de salud emitido por el gobierno».
No solo eso, porque Roma está empezando a parecerse cada vez más a Beijing. Horowitz, de hecho, comparó nuestro giro autoritario con China, «donde más de mil millones de personas están ahora completamente vacunadas» y las autoridades de Beijing no dudan «en impulsar una postura más dura sobre las vacunas. En agosto, las autoridades de al menos 12 ciudades chinas advirtieron a los residentes que las personas no vacunadas podrían ser castigadas si se las consideraba responsables de la propagación de epidemias.
En el artículo se desprende claramente que nuestro país no solo va en contra de la tendencia, sino que ahora es una excepción para las democracias europeas:
«Con el pase, Italia, la primera democracia en tener ciudades en cuarentena y aplicar bloques nacionales, es nuevamente la primera en cruzar un nuevo umbral, dejando claro que está dispuesta a usar la enorme palanca del estado para buscar frenar la pandemia». […] Italia ha tomado ahora la posición más severa de Europa ».
No es solo el NYT el que está asombrado por la deriva autoritaria en Italia . CBS News ya había intervenido sobre la dureza de la disposición el 12 de octubre, definiendo el Green Pass como «la obligación de vacunación contra el Covid-19 más duro del mundo»; Asimismo, el Wall Street Journal lo definió como «uno de los regímenes anti-Covid-19 más duros del mundo occidental», mientras que el Financial Times habló de «una de las medidas más severas para combatir la enfermedad impuesta por un país europeo». En Alemania, el Süddeutsche Zeitung ha aumentado la dosis, señalando que
“Ningún otro país de Europa ha llegado tan lejos. Las protestas son fuertes, aunque provengan de una pequeña minoría».
El Washington Post también habló para describir la dureza de la ley, publicando un artículo en el que destacó las tensiones sociales, la discriminación entre vacunados y no vacunados y las protestas que están sacudiendo al país, subrayando cómo Italia corre el riesgo de una reacción económica por la introducción de » uno de los requisitos de vacunación en el lugar de trabajo más estrictos del mundo».
En el artículo firmado por Chico Harlan y Stefano Pitrelli leemos que ahora Italia se encuentra desatando un nudo fundamental, teniendo que entender cómo convivir con el virus y al mismo tiempo decidir el nivel de control social que el país está dispuesto a aceptar. contrarrestar la pandemia. Lo que sí sorprende, sin embargo, de los medios extranjeros -desde Forbes hasta El Mundo- es también la resistencia de los manifestantes opuestos al pase de vacunación, incluidas marchas, protestas callejeras y la huelga de los estibadores de Trieste.
La prensa británica también ha observado atentamente lo que está sucediendo en nuestro país, según The Guardian.
«Italia se está preparando para una mayor agitación y caos en el mercado laboral a medida que el requisito de vacunación más estricto de Europa entre en vigor el viernes».
El Financial Times se centró en las próximas dificultades también desde un punto de vista económico que en un artículo de Miles Johnson y Davide Ghiglione explicaba que: «La medida fue recibida con una feroz resistencia por parte de un pequeño pero ruidoso número de manifestantes que argumentan que las reglas violan sus derechos».
Liberación habla del riesgo de parálisis en muchos sectores , mientras Le Parisien se pregunta si, debido a las protestas, Italia no sufrirá repercusiones en su economía.
Fuente: visionetv.it
