«Argentina debe resistir al Comando Sur y sus socios que por la vía violenta intentaron un magnicidio»
El analista internacional y director del Ciepe, destacó que las confrontaciones van creciendo en el mundo en la medida que los bloques de poder internacionales, recobran autonomía para desplazar el viejo orden y se proyectan como nuevos ganadores.
Aldo Battisacco – Conclusión Buenos Aires
El sociólogo e investigador de la Universidad Nacional de La Plata, Walter Formento puso negro sobre blanco en diálogo con Conclusión al abordar los alcances de la crisis internacional que se puso en evidencia con la pandemia primero y con la guerra de Ucrania después. De que manera los actores en pugna desarrollan su juego y que es dable predecir a partir de muchas señales, todas ellas muy fuertes, que permiten inferir la pérdida de poder del sector financiero, que se plasma en distintos sucesos que se observan en el viejo continente.
Para el docente universitario, «la crisis es mundial y está claro que en la primera línea de contradicciones a nivel internacional, existe ne uno de los lados al viejo globalismo unipolar financiero en la red de citis financieras globales en un proceso de pérdida de las iniciativas estratégicas, esto se ve con la realidad de Biden o lo que sucede con el gobierno británico, incluso con la crisis dentro de Japón. Todos grandes países referentes desde hace 20 años hoy son sacudidos pro crisis internas estructurales».
«Este acto que dominó de 1999 a 2017, tiene un gran competidor estratégico que está en ascenso, y tiene iniciativa estratégica por ser un actor pluriversal, multipolar, multilateral que se corporiza en los BRICS , pero particularmente en China y Rusia, que se han quedado con la iniciativa, cuando Estados Unidos y Donald Trump, derogó en abril de 2021 el estatuto administrativo especial de la City financiera de Hong Kong y la China nacional retoma el control por primer vez desde 1860 cuando la segunda guerra del opio», apuntó con énfasis el catedrático.
A partir de este momento la contradicción es entre gradual ismo financiero en declive, que controla la OTAN y por eso el peligro de la guerra de Ucrania y porr otro lado, los grandes regionalismos en cabeza de los BRICS, Rusia y China», «esto es importante porque dentro de los EEUU se observa una guerra civil en aumento, que se manifestó en las últimas elecciones, pero que estructuralmente se vive cotidianamente entre el globalismo unipolar que controla las grandes citi financieras New York y San Francisco, enfrentadas al comando sur, a Texas Florida y Oklaoma, a todos los gobiernos republicanos».
Todo esto muestra que hay una incapacidad de Estados Unidos de disciplinar el patio trasero, es decir iberoamérica
Respecto del impacto que genera esta situación, Formento precisó que hay objetivos que se propusieron que no los están logrando, por caso la UE, porque de los pueblos entras en un estado de lucha creciente y lo que se mantiene firme para Davos y la OTAM, es Polonia como cabeza de la iniciativa de los tres mares, pero a pesar de los sabotajes en los gasoductos Nord Stream no logró disciplinar a China, Rusia, India e Irán».
OTAN
«Hay un marco en el que las materias primas recobran valor, en Iberoamérica el conflicto internacional se expresa, creando condiciones regionales y nacionales que dan grados de libertad para que los proyectos nacionales y productivo con inclusión social puedan recobrar la iniciativa y avanzar pasos de profundización, donde esa brecha financiera asociada al Comando Sur, como Bolsonaro y Bullrich, se ven obligados a recurrir a formas violentas para detener y entorpecer los bloqueos que pueden cobrar forma de magnicidio o como el caso de Brasil donde intentaron frenar que Lula sea presidente de Brasil». «Pasa esto también en Bolivia, donde la disputa por el litio», analizó el investigador.
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