Por José Odisio

Ganar en el cierre fue muy poco para un semestre para el olvido donde los números terminaron en rojo. Pero el mayor problema de Newell’s es que la incertidumbre reina en el Parque y hasta que no se conozca quién ganará las elecciones las definiciones brillarán por su ausencia.
¿Seguirá Maxi? El delantero dio una señal de que sí, pero también condicionó su futuro a lo que suceda el 19 de junio. ¿Y Osella? Es improbable, ya que las distintas agrupaciones le sacaron su apoyo y los números de su proceso no ayudan.
Entonces, ¿quién será el DT? Una gran incógnita, sin dudas. Y la demora en conocer quién conducirá el intento de reconstrucción repercutirá en la búsqueda de refuerzos, que será tardía y obligará a la dirigencia a ir con decisión y con billetera.
Una solución sería que las agrupaciones consensúen algunos nombres y así adelantarse, pero pedir que queden los egos de lado y que se piense en Newell’s por encima de todo suena ilógico cuando hay siete agrupaciones en la carrera electoral.
Así, la incertidumbre seguirá y el nuevo ciclo arrancará en desventaja. Es que la confusión se instaló en el Parque y nadie tiene apuro en dejarla ir.