Por José Odisio
¿Vuelve Nacho? La pregunta está instalada desde hace varias semanas en el Parque, pero se hizo más fuerte esta semana a partir de la confirmación que Scocco no debe ser operado y podría estar ante River. Y a partir de esa posibilidad de regreso el hincha empieza a ilusionarse, y tiene razones para hacerlo.
En un torneo largo donde ningún equipo parece ser gran candidato, la Lepra al menos desde los puntos está en una posición inmejorable. Y además tiene el envión anímico que le significó ganar el Clásico, una mochila que quedó en el camino y pareció liberar tensiones.
Desde el juego Quignon viene en levantada, Formica está en su mejor momento y Maxi siempre asusta. Y defensivamente intenta acomodarse, aunque a veces necesita de Pocrnjic. Es cierto que Amoroso no aparece, Osella tuvo que improvisar a Paz de lateral y Moiraghi alterna buenas y malas. Y les reiteradas lesiones golpean semana a semana.
Entonces, el retorno de Scocco puede ser la chispa que necesta el equipo para continuar sumando puntos, pero con un plus desde el juego que lo ponga en el lote de candidatos serios a pelear el título y no como un equipo que parece estar arriba de casualidad.
Si Nacho recupera el nivel que mostraba antes de lesionarse Newell’s estará frente a la posibilidad de dar un salto de calidad desde el juego, tal vez el único reclamo que hoy el hincha le hace a Osella. Y el técnico estará ante su gran desafío. Ya sin presiones, tendrá la chance de demostrar que puede ser verdaderamente ambicioso y salir de esa zona de confort de los puntos que por ahora le alcanza para sonreir, pero no le garantiza felicidad eterna. Con Nacho se puede. ¿Se animará el DT?
