Por Enrique Genovar
Las rachas en el fútbol están para cortarlas. Y en la soleada tarde de primavera Marco Ruben le puso fin a su seguía en el torneo local. El capitán abrió el camino de victoria, necesaria por cierto, y más tarde terminó de decorar el resultado con otro toque a la red. Además su desempeño lo llevó al lugar de figura en la goleada ante Arsenal.
Al goleador se le abrió el arco en la previa de una seguidilla de partidos importantes que se asoman en el futuro. Y fue una de las cuestiones destacadas que tuvo la goleada de Central sobre Arsenal.
El gol de Ruben llegó en el momento justo. El goleador había declarado en la semana que no estaba en una buena racha, pero le pidió a los hinchas que se quedaran tranquilos porque iba a seguir intentando convertir para así revertir su presente. Y cuando se paró frente a la pelota, en el penal, esperó que el arquero se moviera hacia la izquierda y mandó suave la pelota al fondo del arco. El capitán volvió a gritar luego de 578 minutos sin hacerlo en el campeonato de Primera. Y ya en la segunda parte definió tras una buena jugada de Bordagaray, minutos después de haberle cedido a Fernández la posibilidad de cambiar por gol el segundo penal de la tarde. Encima con el doblete llegó a 65 goles con la camiseta canalla y se metió entre los diez goleadores históricos del club superando a Omar Palma que hizo 64.
Después fue el de siempre: luchó como en todos los partidos y en varios pasajes no titubeó al ir al roce contra los rivales.
Ruben cortó la sequía que acarreaba por el torneo local en el momento justo y es una buena señal de cara a los bravos encuentros que el Canalla jugará después del breve receso que habrá por Eliminatorias.
El funcionamiento del equipo
En cuanto al juego, el equipo de Eduardo Coudet mostró varios signos de mejoría con respecto al encuentro en Rafaela y dio un paso al frente en pos de la búsqueda del del ideal. Central tuvo la mejor producción futbolística del torneo. Volvió a mostrarse seguro en defensa y de a poco comienza a ser un equipo sólido. Fue contundente y en un partido hizo más goles que en los anteriores cuatro. Volvió Ruben al gol y Camacho se convirtió en el goleador del equipo.
El primer tiempo no fue bueno. Arsenal con muy poco le cortó los circuitos de juego y trató de presionar arriba. Y cuando lo logró, al Canalla no le quedó otra que saltar líneas para poner a los de arriba mano a mano con los defensores.
Coudet intentó siempre que su equipo juegue y tras un primer tiempo no tan bien jugado, Central mostró varias cosas interesantes en el complemento que sin dudas deberá apuntalar para continuar en la búsqueda del ideal. Y terminó goleando y pasando por arriba a un rival que sólo pudo dar algo de pelea en un tiempo de partido.
Central ganó, goleó y terminó gustando por lo hecho en la segunda parte. Un buen prólogo para lo que se le viene, con la eficacia como principal bandera.
