Por Enrique Genovar
Depurar para luego reforzar. Las vacaciones en Central sólo son patrimonio de los jugadores. Ya que el resto de los actores tendrán un arduo trabajo, especialmente los dirigentes encargados del fútbol y el entrenador. La tarea, como siempre, no será sencilla; pero aprender de los errores para que no afecte el futuro es la principal premisa que deberán seguir en esta etapa.
Directivos y técnico consensuaron los jugadores prescindibles y hubo total acuerdo. Los nombres no son difíciles de descifrar; ya que quedó a la vista en las dos competencias que jugó Central quiénes rindieron y quiénes no.
Pero la que sí o sí no puede tener margen de error es la etapa de refuerzos. Es que de los tres libros de pases que compartieron esta dirigencia con el técnico, el último dejó mucho que desear. Es que de los seis futbolistas que arribaron al club a inicios de este semestre, salvo Germán Herrera, el resto rindió poco y no dieron soluciones de ningún tipo.
El margen de error en las incorporaciones debe ser cero, más allá de que en el fútbol eso parece casi imposible. Pero si un equipo quiere ser protagonista y llegar a la gloria no debe haber equivocaciones en materia de refuerzos, y esta es la premisa que deberá tener el mercado de pases que se avecina.
Foto: Marcelo Manera
