Por Juan Manuel Martellotto

El abogado y escritor Hernando Quagliardi presenta su novela corta “El plan de Asja Lacis” el viernes 10 de noviembre a partir de las 18 en el bar El Molino (Corrientes y Tucumán). Cabe destacar que la obra obtuvo el primer premio del IV certamen literario Rody Moiron. 

“La novela parte de una historia real, un viaje del filósofo Walter Benjamin a Moscú tras los pasos de la actriz letona Asja Lacis. Una mujer muy atractiva, moderna, una adelantada a su tiempo, muy libre, una actriz que era admirada en su época por figuras tales como Bertold Brecht, cuenta el escritor en diálogo con Conclusión.

Esa historia -profundiza Quagliardi-, que se recoge en el “Diario de Moscú” de Walter Benjamin, es el telón de fondo de otra historia que sucede en San Antonio de Areco, y que tiene una trama policial alrededor de un coleccionista de libros y dos personajes que intentan estafarlo”.

-¿Qué significó ser galardonado por esta novela con el primer premio Rody Moiron?

-El premio del certamen Rody Moiron es muy importante. Se puede decir que hay un espacio de silencio en la literatura que envuelve escritores y textos; escritura al fin, que forma parte de esos silencios a la espera de ser publicada, y que se debate en este tipo de concursos que es una de las pocas puertas de acceso para hacer oír las voces de nuevos escritores.

-¿En qué géneros literarios te sentís más cómodo?

-Me gusta escribir relatos, cuentos, me he movido en el registro lírico, en el poema, y últimamente en la novela corta, hecha de fragmentos en diálogo permanente con otros textos. Desde hace muchos años, colaboro en contratapas de Rosario 12.

-¿Qué expectativas tenés en relación a la presentación del libro?

-Las expectativas por la presentación de un libro siempre son altas. En Rosario, así como lo fue en Junín, uno se encuentra con lectores atentos. Es el momento del cara a cara con los lectores, entre ellos muchos amigos, como será contar con la presencia del escritor Ricardo Dall´Aglio quien estará a cargo de la presentación del libro.

-¿Por qué elegiste el bar El Molino para la presentación de la novela? ¿Por cábala, por ser un bar tradicional, por ser céntrico o por nada en especial?

-El bar El Molino es un espacio mágico. Su traza de “notable” (como se les llama a los bares históricos), su ubicación no solo en el espacio de una ciudad que ronda la paradójica zona calma del centro, sino a lo largo del tiempo de la frecuentación, lo tornan singular. Me considero un buen parroquiano del café y esa es una de las tantas razones para elegirlo. Sus paredes tienen mucha historia, fantasmas entrañables de la cultura y el quehacer nacional. Por nombrar algunos: el poeta rosarino Hugo Diz, el dirigente Agustín Tosco, el historiador Ricardo Falcón. En sus mesas se suele uno perder por arreglar el mundo, e incluso se ha llegado a decir- pero no puedo asegurarlo- de enigmas del café, de una puerta secreta que en vez de salir a la calle Tucumán, nos deja en Venecia, muy cerca de la locación de una de las novelas de Henry James.

-¿Algo que quieras agregar, que consideres importante?

-Por agregar: la fe en el libro, en la lectura y en los lectores, más hoy, más en estos tiempos convulsionados como son siempre los tiempos; un optimismo que nadie nos podrá quitar a los que elegimos la literatura como vehículo de comunicación.