Vecinos de los barrios Los Troncos y Funes R se movilizaron este lunes al atardecer hasta la esquina de Angelomé y Ruta Nacional 9 para reclamar seguridad por los reiterados hechos delictivos ocurridos en la zona.
Con pancartas, bombos y cacerolas los vecinos manifestaron su enojo por los reiterados hechos de inseguridad y cortaron el tránsito sobre la ruta 9 por un espacio de dos horas aproximadamente.
Entre rostros de preocupación y bronca la manifestación fue una expresión colectiva de los sentimientos de los vecinos por las seis entraderas sufridas en los últimos 15 días.
En la protesta, estuvieron presentes miembros del gabinete municipal, entre ellos el secretario de Gobierno Gonzalo Miranda Aguiar, el de Salud Marcelo Galicchio y el de Producción, Luciano Sanpelegrini, pero la intendenta Mónica Tomei no asistió. En tanto, cinco de los seis concejales participaron de la marcha, excepto Ana Martelli que no se hizo presente en el lugar.
En tanto el comisario Miguel Oliva, titular de la Unidad Regional II se había comprometido a concurrir pero finalmente se excusó y no participó. Pero en su representación estuvo el jefe de Orden Público, comisario Fernando Arco, junto a los jefes y subjefes de la Comisaría 23 y el Comando Radioeléctrico.
Durante la protesta se vivieron momentos de tensión y discusiones subidas de tono entre vecinos, concejales y representantes de la fuerza policial que derivó en dos acuerdos. En primer lugar, se reunirán hoy a las 17 con la jefatura de Gendarmería Nacional en Rosario, en compañía de seis concejales. Luego, a las 20 el encuentro será en el Club Atlético de Funes donde escucharán la propuesta de la Policía provincial para detener la ola delictiva que azota a la ciudad.
En tanto, Ramiro, un vecino que sufrió un hecho violento relató que “en un lapso más o menos de 1 mes ha habido cerca de 9 entraderas, el caso mío nos redujeron entre 4 y 5 personas cuando llegábamos a mi casa, tenían hasta picanas. Nos metieron en el domicilio, exigieron dinero y al no encontrar una suma grande, yo tengo un utilitario y empezaron a cargar electrodomésticos, ropas, y cuando me sacaron el DNI y vieron que tenía una dirección de Rosario empezaron a interrogar de donde era, porque yo no hice el cambio de domicilio y nos terminaron cargando en la camioneta y nos llevaron hasta lo de mi padre para terminar robando en la casa de ellos también”.
Por su parte, Virginia manifestó que “hace un mes empezó una seguidilla de robos y entraderas muy violentas a toda hora del día. Además destacó que “hay pocos móviles para la gente que hay y no pueden hacer mucho y de la intendencia nadie se acercó y dio respuestas”.
Los vecinos sospechan que es una banda de 3 o 4 personas que delinquen en la zona. “Es algo muy raro lo que está pasando y algo tenemos que hacer. Desde el viernes de la semana pasada ocurrieron 8 hechos delictivos a lo largo de tres cuadras” agregó Virginia.
