El día después de la furia. Tras la violenta protesta de un grupo de camioneros ayer por la noche en la planta cerealera Dreyfus en la localidad de General Lagos, por demoras en descarga de granos, los edificios de portería, enfermería y calada (estructura edilicia y equipos para muestreo de calidad de los granos a descargarse de los camiones) así como 12 automóviles terminaron incendiados o dañados por los manifestantes.

Los hechos comenzaron a las 19.30 cuando un grupo de personas aún no identificadas desataron una agresiva protesta que pronto escaló con el inicio del incendio de las instalaciones del predio y roturas de una veintena de autos.

El ataque culminó cerca de las 21.40 luego de que las autoridades restablecieran el orden y los bomberos apagaran el fuego. La situación actualmente se encuentra controlada.

Desde la aceitera calificaron lo sucedido como un «hecho vandálico» y aclararon que los tiempos de espera son los habituales en épocas de cosechas.

«Por suerte no hay ninguna víctima, sólo daños materiales, que de todos modos son importantes», señaló Luis Zubizarreta, director de relaciones Institucionales de Dreyfus.

Asimismo explicó que en esta época del año hay por la cosecha un flujo de camiones importante, «pero no había ninguna situación extraordinaria ni de emergencia, estaban descargando los camiones normalmente y había una cantidad de camiones razonable para esta época del año«. Agregó además que había camiones que a lo sumo estaban esperando desde hace 17 horas.

De esta forma, para el director institucional de Dreyfus «no hubo ningún detonante que hayamos percibido que pudiera justificar alguna situación como esta».

Consultado por  las supuestas demoras en la planta aceitera, señaló que en promedio descargan en Dreyfus unos mil camiones a diario, y que ayer había cerca de 800 camiones en la playa.

«Lo que pasó es algo que tenemos que investigar a fondo, con todos los elementos que podamos tener en la planta y haremos la denuncia correspondiente, pero no tenemos en claro cuál fue el detonante de esta situación«, agregó Zubizarreta.

«Debemos aclarar que la descarga de camiones estaba funcionando dentro de los parámetros habituales para esta época de plena zafra y sin demoras extraordinarias», finalizó.

Los equipos de coordinación logística están abocados a despejar la playa de camiones durante la mañana de hoy, para luego poder evaluar en detalle los daños materiales ocurridos. El personal de la empresa se ha puesto a disposición de las autoridades para colaborar en la investigación de los hechos ocurridos a fin que se pueda someter a la justicia a los responsables de este incidente.

Aceiteros se queja y denuncia

Ante los graves sucesos ocurridos, desde la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina, denunciaron la responsabilidad de la empresa y exigieron que la misma tome las medidas necesarias para garantizar la integridad física y la vida de todos los trabajadores de dicho establecimiento.

Según aclararon mediante comunicado, ya habían denunciado la práctica empresarial de Dreyfrus de otorgar cupos de descarga más allá de la capacidad de la planta y de las posibilidades de organización del proceso de descarga. Dijeron que esta situación ha sido denunciada en reunión del comité mixto de Seguridad e Higiene en la empresa, el día 21 de abril de 2015.

«La actitud de la patronal de planificar y continuar esta práctica no solo es irresponsable sino que tiene el objetivo deliberado de crear un clima hostil y violento en el marco de la negociación colectiva que se lleva adelante en las paritarias en curso», denuncia el comunicado.

También criticaron «esta actitud que evidencia la mala fe y deslealtad negocial de la empresa en la paritaria salarial que se lleva adelante, por lo que deslindamos toda responsabilidad de los trabajadores, y responsabilizamos a la empresa por todas las derivaciones de la presente situación».