Tras pasar a una nueva fase de la cuarentena administrada en todo el territorio santafesino, los lavaderos de autos volvieron a funcionar. Si bien la concurrencia de vehículos es menor que la habitual, la habilitación logró oxigenar la situación de los trabajadores del sector, que acumularon cincuenta días sin trabajar ni tener ingresos derivados de la actividad.

Los lavaderos -según fijaron las autoridades locales- podrán funcionar de lunes a sábado de 9 a 18 con un máximo de tres personas por local y en estricto uso de los elementos de protección indicados en los protocolos.

Belén, del lavadero Burbu Cars, fue consultada por Conclusión por el impacto del parate de actividad y expresó que los afectó «en todo, porque es la única fuente de trabajo» que tienen.

«Hay más de 60 familias que viven de todos los lavaderos que funcionan en calle Pellegrini. Cada uno de ellos depende del día a día. Si no se lava no hay plata, no hay otra entrada de dinero», señaló.

Más de 60 familias viven de los ingresos que genera la actividad sobre calle Pellegrini

Ariel, del lavadero El Pato, explicó a Conclusión que en total funcionan treinta lavaderos en la zona: diez pagan alquilen y veinte son dueños. «A estos últimos no les importa si cobrás 100 o 200, si les vas a decir algo te dicen que no los molestes. Nosotros somos inquilinos, no somos dueños, trabajamos (habitualmente) de domingo a domingo. El que alquila tiene que venir todos los días a trabajar, no queda otra«, apuntó.

Tal describió el trabajador de El Pato, desde la Municipalidad les indican qué elementos de protección deben utilizar para poder funcionar, pero deben adquirirlos por su cuenta. «Los tenemos que comprar nosotros. Usamos alcohol en gel, lavandina, guantes, barbijos y botas, queremos trabajar», expresó. A estos gastos extraordinarios se suma el pago del alquiler mensual, que para ese lugar -contó Ariel a Conclusión– ronda los 48 mil pesos.

La concurrencia -de momento- es mínima, pero esperan una pronta recuperación

Al ser consultado por las expectativas que tienen tras la habilitación, Ariel auguró que «va a haber trabajo» porque cuando estuvieron sin funcionar, parados en la vereda del lavadero «la gente se quería meter para hacerse lavar el auto igual».

Antes de que se dictara la cuarentena, en El Pato trabajaban diez personas que, en dos turnos, lavaban entre 35 y 40 autos por día, pero actualmente ese número se ve reducido por los protocolos de seguridad sanitaria.

El lavado completo sale 300 pesos por vehículo

«Más de tres personas no se puede estar. Es el protocolo que dieron», resaltó Belén de Burbu Cars.

Por último, ambos trabajadores contaron que el precio definido para cada lavado quedó fijado en 300 pesos.