En una conferencia conjunta, la intendenta de la ciudad, Mónica Fein, el secretario de Cultura, Guillermo Ríos y el titular del Ente Turístico de la ciudad , Héctor de Benedictis realizaron un balance sobre lo vivido en Rosario durante las vacaciones de invierno y cuyo resultado es un balance sumamente positivo en cuanto a la calidad de las actividades ofrecidas y en cuanto al número de visitantes y público que fue parte de las propuestas.

«Hubo una fuerte implicancia del gobierno local para fortalecer lo público y para fortalecer la idea de que las vacaciones de invierno son un espacio de encuentro para que chicos y grandes pueden disfrutar de la ciudad», afirmó la intendenta Mónica Fein.

«Hubo 250 propuestas, algunos conocen las más hclásicas, como el Tríptico de la Infancia por donde pasaron alrededor de 120.000 personas, pero las propuestas se multiplicaron y se sumaron además nuevos lugares y espectáculos. Se sumaron por ejemplo el Mercado del Patio y, por supuesto, los espacios en cada uno de los distritos que tuvieron que ver con la economía social y el biomercado.  La ciudad puso a disposición todas estas actividades para que nadie, ningún chico ni nigún  grande se quede sin la oportunidad de tener unas vacaciones de invierno y compartir y construir esos lazos familiares y, sin importar la capacidad económica de cada uno. Justamente hicimos cultura pública», afirmó.

Además, la intendenta señaló la gran cantidad de visitantes de otras ciudades que eligieron a Rosario para esta temporada, y señaló que se extendió la programación de espectáculos y actividades durante una semana más teniendo en cuenta que «hay un gran número de visitantes de Buenos Aires y Córdoba que aún están en vacaciones».

«Por todos estos espacios y  actividades han pasado más de 200.000 personas, hemos encontrado muchas familias con pocos recursos económicos y esa era la idea, genera un espacio en el que todos pudieran disfrutar, sin importar las recursos de los que disponen».

Por su parte, el secretario de Cultura, Guillermo Ríos enfatizó que el objetivo fue «expandir las vacaciones de invierno y que todo el mundo tuviera una actividad cercana». «No sólo cercana territorialmente, sino cercana económicmente. Es decir, lo que buscamos fue que lo económico no fuera un obstáculo determinante para no tener unas buenas vacaciones. También pensaba en los grupos, porque cuando recorríamos las actividades, veíamos familias de distintos tipos y lugares recorriendo y trasladándose por la ciudad. También hubo una nueva propuesta, que se trató de carpas que instalamos en dos barrios, ambas con actividades que fueron muy bien recibidas y muy valoradas».

En tanto, desde el Etur coincidieron en que «estas vacaciones se han convertido en una época de temporada alta de turismo en la ciudad». «Rosario tiene una serie de infraestructuras dedicadas a lo que es la infancia que son de calidad, en lo profesional y en el servicio -señaló De Benedictis- «eso nos convierte en la ciudad top del turismo de familia».

De Benedictis destacó además que «este año se ha mantenido el promedio, hasta ahora, hay que esperar hasta el fin de semana para confirmarlo, pero mantenerlo no es poca cosa». «Estamos viviendo momentos muy duros a nivel económico y el Estado debe estar más presente todavía, entonces en este marco, mantener el promedio del año pasado no es poco».

«Estamos muy satisfechos con lo logrado, afirmó el titular del Etur, hay mucho trabajo y gestión de calidad que hace que la gente venga y disfrute». Todos trabajamos con los artistas independientes, Acuario, Trítptico de la Infancia… Además hay que destacar que la ocupación hotelera estuvo alrededor del 70% hasta ahora, aproximadamente el mismo nivel que el año pasado pasado y eso lo leemos bien porque a pesar de la compleja realidad económicam se logró sostener». Los hoteleros no ajustaron los precios como debieran haber hecho, pero porque saben que es una temporada que les cambia el año. Hemos trabajado en conjunto el sector privado y el sector público».

«Al final de todo -remarcó- todo se reduce a la sonrisa de los chicos, al final  todo se reduce a eso. Destacamos la calidad humana de todas las personas que trabajan en esto, que se ponen la camiseta y que disfrutan de esto y eso hace que la familias y los chicos también disfruten».