Una médica ginecóloga del Hospital de Emergencias Clemente Alvarez presentó síntomas y dio positivo para Covid-19, lo que provoco la necesidad de rastrear y aislar a todos los compañeros. Fuentes de la institución confirmaron a Conclusión que no se puede afirmar que el contagio se haya producido allí mismo ya que la joven está en pareja con un médico que trabaja en un institución privada y también dio positivo por coronavirus. A pesar de ello, trabajadores de Heca plantearon ciertas inquietudes sobre las medidas de seguridad y prevención que se toman sobre todo, en poblaciones de riesgo como ser médicos y otros trabajadores de la salud.
La médica contagiada es residente del servicio de Ginecología del Heca y según uno de sus compañeros, también delegado de los trabajadores del sector administrativo del Hospital, el pasado jueves presentó síntomas y fiebre. Inmediatamente se le realizó el hisopado y dio positivo.
Con ese cuadro, la joven fue sometida a aislamiento inmediato y Epidemiología realizó un seguimiento de las personas con las que había estado en contacto, tanto sus compañeros de trabajo como pacientes que pudiera haber atendido y se analizaron las situaciones posibles de contagio. Hecho esto, 25 personas fueron puestas en aislamiento estricto por 14 días. Eso incluyó a trabajadores del mismo sector en el que se desempeña la médica contagiada aunque no hubieran estado en contacto directo con ella.
Testeos, controles y medidas de seguridad
Si bien no puede asegurarse que esta médica se haya contagiado allí, ya que hay una sospecha fechaciente de que la fuente de contagio fue su pareja, un médico que se desempeña en el Sanatorio Parque, el caso positivo abrió una serie de interrogantes y entre sus compañeros de trabajo hay quienes cuestionan algunas de las políticas de prevención adoptadas.
En relación a este punto, Alejandro Parlante, delegado del sector administrativo del Heca señaló dos puntos que preocupan mucho a los trabajadores. Por un lado, sostener que si no hay síntomas no hay contagio y por otro lado a negativa a hacer testeos masivos.
La política oficial del hospital y de la Secretaría de Salud Pública viene siendo que sólo empieza el contagio con la aparición de fiebre, cuestión que es cuestionada por la experiencia y por múltiples publicaciones científicas que sostienen lo contrario: el paciente asintomático también contagia, aunque sea en menor medida.
«Uno de los problemas de seguridad, para mi, radica en el aferrarse a sostener que cuando no hay síntomas no hay contagio. Esa es lo política oficial del hospital y de la Secretaría de Salud Pública. Esto viene siendo cuestionado por muchas publicaciones médicas y científicas que señalan que, aunque en menor medida, aún cuando no hay sintomas puede haber contagio. La mayoría se inclina por esa hipótesis. Está claro que esta es une enfermedad nueva y aún no hay muchas certezas pero, y sobre todo por eso, consideramos que desde la salud siempre deben tomarse medidas contemplando la peor hipótesis»
El otro punto cuestionado por algunos trabajadores de la salud surge en relación a los testeos masivos. «Nosotros creemos que en determinadas porblaciones, y sobre todo en el caso de los que trabajamos en salud, es necesario hacerlos, es necesario aplicar el testeo masivo, más allá de que los porcentajes de eficiencia no sean del 100%».
También hay un cuestionamiento y una preocupación por las condiciones en que son licenciados y aislados los trabajadores de la salud. «Una de las compañeras aisladas es único sostén de familia y tiene hijos. Y en ese sentido no hay un seguimiento o apoyo para determinados casos. Las medidas oficiales son sólo enviar a casa al trabajador, si aparece algún síntoma avisás y si no tenés síntomas volvé a trabajar. Eso es todo lo que se hace desde la institución, pero no hay un seguimiento o apoyo por parte del hospital o la Secretaría de Salud Pública o Desarrollo Social o de los ministerios, para asisitir en estos casos a los trabajadores que exponen su propia salud y quedan medio a la deriva», señaló Parlante.
