Organismos de Derechos Humanos, sindicatos, concejales y representantes de diversas multisectoriales de la ciudad encabezaron la habitual ceremonia de plantación de árboles en el Bosque de la Memoria -ubicado en el parque Scalabrini Ortiz-, pusieron en valor diferentes luchas y destacaron el desafío de construir un encuentro intergeneracional que mantenga presente el compromiso de cada 24 de marzo.

 

La ceremonia contó con la presencia del intendente Pablo Javkin, pero tuvo como principales protagonistas a las organizaciones de derechos humanos que trabajan a diario en la ciudad para construir memoria. Con ese fin fue que plantaron cinco árboles que hicieron alusión a causas;  referentes de luchas; y desafíos para un presente asediado por un negacionismo en alza.

Cinco árboles

Según puntualizaron los organizadores del acto, cada árbol plantado tiene su referencia: «El primer árbol plantado tuvo Por les 30.000 compañeras y compañeros desaparecides y asesinades por la última dictadura cívico militar eclesiástica. No les olvidamos. Por la lucha diaria de quienes integran los diferentes organismos de Derechos Humanos. Por las Madres y Abuelas. Por más Memoria, por más Verdad, por más Justicia. Recordamos al compañero Juane Basso de Hijos a un año de su partida».

Segundo árbol: «Por nuestra América Latina, por el despertar de nuestros pueblos, por sus luchas colectivas en las calles. Por una sociedad más igualitaria, por la paz y la integración de nuestra Patria Grande. Contra el negacionismo. Basta de prácticas y de políticas racistas y discriminatorias».

Tercer árbol: «Por la no violencia contra las mujeres. Decimos basta a la violencia machista y patriarcal. A la sociedad machista y patriarcal le gritamos Nunca Más. Nos seguimos preguntando ¿Dónde está Tehuel?. Basta de crímenes de odio hacia las disidencias sexuales. Basta de femicidios».

Cuarto árbol: «Por les jóvenes asesinades y torturades por las fuerzas de seguridad. Basta de gatillo fácil. Nunca más Violencia estatal. Nunca más desapariciones forzadas en democracia».

Quinto árbol: «Basta de políticas que arruinen nuestro suelo y nuestras aguas, y embarguen nuestro futuro. No a la entrega de nuestros recursos naturales. Ley de humedales ya. Por la soberanía económica y territorial de nuestros pueblos».

Identidad, lucha y resistencia

La actual concejala de Ciudad Futura/ Frente Social y Popular, Luz Ferradas que desde agosto de 2021 ya no lleva el apellido de su padre, el genocida Ovidio Marcelo Olazagoitia; estuvo presente en este nuevo acto por el día de la Memoria.

Cada 24 de marzo, la lucha colectiva se entrelaza con la personal. «Estas fechas no dejan de emocionarnos. Creo que es importante seguir siendo muy sensibles a la lucha de los derechos humanos en toda nuestra ciudad y el país. Fueron, en muchos sentidos, los grandes y las grandes hacedoras de la libertad. Primero, sosteniendo la memoria y sabiendo que hoy todavía hay nietos y nietas que buscamos; y habilitando para un montón de otres la posibilidad de vivir en la verdad, como es mi caso personal. No deja de emocionarme poder sentirme parte y, felizmente a través de los juicios poder vivir mi identidad elegida».

En la actualidad, todavía hay quienes reniegan de que pueden elegir su identidad libremente. «En mi caso no como víctima del terrorismo de Estado, pero sí como una consecuencia que en un primer momento no se veía, tratamos de rendir nuestra vida en honor a la lucha de los compañeros que ya no están», concluyó.

Volver a los encuentros colectivos

Alejandra Cavacini es parte del Departamento de articulación territorial del Museo de la Memoria y en el acto de hoy, en el bosque de la Memoria, hizo hincapié en la importancia de volver a lo presencial, a las acciones y los encuentros colectivos.

«La verdad que estamos muy contentos de volver a los círculos, los rituales, los encuentros colectivos después de todo este tiempo de pandemia. En esta fecha tan especial buscamos el encuentro intergeneracional y que las juventudes puedan tomar la palabra y protagonizar estos encuentros para construir memoria, siempre desde el arte, desde los sonidos, los cuerpos y lo ancestral; articulándolo con las luchas del presente, que tenemos pendiente en esta democracia» enfatizó la psicóloga y coordinadora de Articulación Territorial.

Siempre en búsqueda de nuevas estrategias para comunicar, convocar y estar presentes de manera permanente. «Desde el Museo, puntualmente desde el área de articulación territorial, que es esta articulación con las organizaciones territoriales; las problemáticas del presente; las violencias y la vulneración de los derechos en el presente. Es desde ahí que construimos la memoria y tenemos presente lo que pasó, pero no como algo lejano, sino como algo que al día de hoy todavía nos está pasando y no podemos mirar para otro lado. El compromiso es el modo que tenemos para responder a estos avances negacionistas que quieren arrasar con nuestras políticas participativas y estrategias de lucha por todo lo que nos falta», concluyó.