El conductor de una camioneta protagonizó esta mañana un sinestro vial de sorprendentes características, pero se lo tomó con humor y autocrítica. Afortunadamente no sufrió heridas de consideración, aunque el vehículo quedó bastante dañado.

El hombre que circulaba en su camioneta por Avellaneda al 4300, se detuvo en el paso a nivel al observar las barreras bajas, pero la ansiedad o la vorágine que se vive a diario lo llevó a cometer una «imprudencia», según su propio relato y terminó impactado por la locomotora de un tren.

En el momento del siniestro pasaron dos trenes en sentido contrario, el conductor vio pasar una de las formaciones y comenzó a cruzar con la barrera baja sin advertir que en sentido opuesto se acercaba otro tren que terminó embistiéndolo.

Según contó el conductor, en diálogo con Conclusión «una moto y una bicicleta pasan en el sentido contrario al que estaba yo y arranco. En ese momento me encuentro con el otro tren que venía en sentido contrario», aunque aseguró que las barreras «estaban funcionando bien».

A pesar de la destrucción del vehículo y los trastornos que le provocó el accidente, Claudio lo tomó con humor y aclaró que «estoy bien, solo tuve un golpe en la pierna. Ya me atendió el Sies».

Según testigos el tren, como lo hacen habitualmente al llegar a un paso a nivel «venía tocando bocina, pero no la escuché. La verdad no tuve tiempo ni de asustarme», bromeó el hombre, y agregó que «fue una imprudencia».

Respecto a las consecuencias del siniestro, expresó que «resulté ileso, pero me han herido más en mi fuero íntimo que el golpe».