A las 9.38, hora exacta en la que ocurrió la explosión, nuevamente se escuchó el estremecedor sonido de la sirena de los bomberos. Sirena para no olvidar, para mantener viva la memoria de las víctimas y de toda una ciudad que no volvió a ser la misma.
Familiares, ciudadanos, vecinos de la zona y representantes de todo el arco político fueron parte de un nuevo acto de conmemoración de la terrible y trágica explosión ocurrida en el edificio de calle Salta 2141.
El diputado Carlos Del Frade, presente en el acto, señaló: «Lo que queda claro es la fenomenal impunidad de Litoral Gas. Según su último balance presentado, la empresa factura más de 3.500 millones de pesos por año. Ha ganado 370 millones de pesos el años pasado y ese fenomenal poderío económico, hace que la justicia nos muestre su peor cara. La justicia santafesin a y rosarina es una red de pescadores invertida, por donde pasan los peces grandes y quedan atrapados los peces chicos», enfatizó el legislador.
Por su parte, la intendenta Mónica Fein, señaló: «A todos nosotros nos viene a la memoria y al corazón lo ocurrido hace cinco años atrás, y hoy estamos acompañando a las familiasn que sigue pidiendo justicia y también acompañando para que este lugar se convierta en un espacio de memoria y de cultura».
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Además, la intendenta se refirió a la falta de fecha de juicio: «Es terrible que no haya Justicia cinco años después de lo ocurrido. La mayoría de los familiares siente que la Justicia no cumplió, y eso hace que se sientan mucho más angustiados. Más allá de este espacio cultural, educativo y de la memoria, la Justicia es fundamental. Así que me solidarizo con ese pedido de todos los familiares. La Justicia generalmente nos viene demostrando que llega bastante tarde a estas cosas y no en el momento que lo necesitamos».
Luego de que, a la hora señalada, sonara la sirena de los Bomberos, comenzó el acto. Los familiares que tomaron la palabra durante el acto, luego de la actuación de la cantante Cecilia Petrocelli, volvieron a repetir lo ya tantas veces dicho: que quienes padecieron ese horror fueron víctimas de » tragedia evitable, víctimas de la inoperancia, negligencia y corrupción». Luego, en un emotivo momento, se nombró a cada uno de las 22 víctimas fatales y se gritó presente por cada uno de ellos.
Claudia Vaio, mamá de Santiago Laguía recordó: «A esta misma hora les arrebataron su vida y sus sueños a nuestros seres queridos. El recuerdo de ellos sigue intacto en nuestras vidas cotidianas».
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Por su parte, Marcela Nissoria pidió: «No nos dejen solos en este reclamo, es muy duro. Parece mentira que hayan pasado cinco años de uno de los desastres más difíciles de explicar: 22 muertos, 66 heridos, 300 hogares destruidos y una ciudad conmocionada. Todo eso no basta para tomar conciencia y trabajar seriamente con el coraje necesario para producir los cambios y que algo así no vuelva ocurrir».
Nisoria se refirió al poderío e impunidad demostrado por la empresa Litoral Gas, el estado de la causa judicial, que no avanza y que aún no fue a juicio y la falta de políticas públicas para que no vuelva a repetirse una tragedia de estas características. «Me refiero a camibos que se deberían haber producido, como la señalización de la red de gas, la normalización de las instalaciones que están fuera de la normativa vigente, la normalización de las llaves de corte, y la atención de los reclamos en tiempo y forma»
Además, los familiares recordaron que la empresa ni siquiera pagó la multa impuesta por el Enargas por 13 faltas graves, multa que ascendía a los 6 millones de pesos. «La empresa Litoral Gas se ha dedicado, no sólo a no colaborar en la investigación y en la causa, sino que la han entorpecido sistemáticamente». Además, recordaron que, a día de hoy y a cinco años de la tragedia, no hay estipulada fecha de juicio.
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Durante el acto, los oradores le dedicaron varios parráfos a Litoral Gas y al Ente Nacional Regulador del Gas, que debería ser quien garantice un servicio eficiente y seguro a los usuarios.
También se refirieron una y otra vez al estado de la causa judicial y a la falta de fecha de juicio, y criticaron duramente a los jueces y fiscales e incluso a los abogados, y recordaron que la mayoría de los familiares terminaron «bajándose de la causa porque no se han sentido representados por sus propios abogados».
El mal momento
Mientras las sirenas sonaban, vecinos del sexto piso del edificio de enfrente arrojaron una botella contundente y Miguel Angel Pereyra, un hombre que viajó desde la plata para asistente al acto resultó herido.
El hecho despertó la indignación de los familiares y personas que se encontraban en el lugar. Desde el escenario le respondieron al agresor; «nosotros no somos los responsables de la tragedia de Salta 2141. No somos los culpables, pero estamos acostumbrados a que nos peguen, así que vamos a seguir con el acto», remarcaron.
