Mediante un decreto de autoría del concejal Ariel Cozzoni, del bloque Un Gol para Rosario, el Concejo Municipal aprobó en la sesión de este miércoles, por unanimidad, la creación de un Estudio de Grabación Municipal, con el fin de promover el desarrollo y promoción de las manifestaciones culturales, con gran efecto especialmente en el campo de la música local, de intérpretes solistas, bandas y conjuntos vocales o mixtos.

El edil señaló en los considerandos de la norma aprobada el alto impacto que puede significar para las y los artistas rosarinos la instalación de un establecimiento de ese magnitud con el beneficio de la gratuidad, teniendo en cuenta los altísimos costos de grabar un material propio con estándares de calidad apropiados para su difusión.

Poner al servicio de la comunidad una sala de grabación gratuita con tecnología y acompañamiento técnico de primer nivel implica concretar la posibilidad de acceso a una herramienta fundamental para la agenda cultural de la ciudad.

El ex futbolista señaló la importancia de la promoción y la protección de todas sus expresiones vinculadas a lo musical y de facilitar el acceso a la difusión de esas realizaciones, cualquiera sea su género musical y en general para todo tipo de manifestación artística que tenga que ver con el sonido.

Cozzoni agregó que “diversas manifestaciones se ven afectadas por falta de recursos, imposibilitando a quienes recién se inician la contratación de un estudio profesional de grabación ya que en la actualidad implica disponer cifras que no suelen estar al alcance de los jóvenes”.

El funcionario concluyó argumentando que “la ciudad de Rosario, cuyo liderazgo en talentos musicales no requiere de menciones específicas, no puede mantenerse al margen e indiferente frente al amplísimo abanico de oportunidades que se abren a nuestras expresiones musicales a partir de la existencia de una sala con los objetivos y funciones como la que se proyecta”.

El Estudio Municipal de Grabación funcionará en el ámbito de la Secretaría de Cultura y Educación, debiendo cooperar con los intérpretes para favorecer la difusión del producto logrado, a fin de que llegue al público a través de plataformas de distribución musical digitales (como YouTube, iTunes, Tidal, Pandora, Spotify, etc.) o por medio de un soporte físico (CD, DVD, vinilo, etc.).