Bajo el lema «No mata el frío, mata la indiferencia», este miércoles en la ex Maternidad Martín, en Moreno y San Luis, «Rosario Solidaria» dio oficial inauguración a la apertura del Perchero Social, y a la repartición de mantas tejidas destinadas a personas en situación de calle.

Convocados por la campaña nacional Frío Cero, lanzada por Red Solidaria, la ONG rosarina se sumó al movimiento para combatir el invierno, y con una amplia concurrencia entre música y sonrisas las voluntarias dieron inicio a la apertura de los percheros, una iniciativa que surgió hace unos años atrás como consecuencia de la conjunción de algunos factores: los fríos intensos, la gente carente de abrigo, y el indispensable amor y generosidad que se necesita para articular la idea y llevarla a cabo.

Los percheros se encuentran distribuidos en algunos espacios públicos de la ciudad, y funcionan con el simple y significativo acto de dejar colgado un abrigo, y que este sea tomado por alguien que lo necesita. «El perchero lo hicieron entre dos o tres voluntarios, siempre poniendo buena onda y alegría. La calle no es un lugar para vivir, son nuestros hermanos, hay que estar y poner más que nada el cuerpo, con amor» expresó Jorgelina, una de las voluntarias fundadoras de la ONG, y agregó: «Una simple prenda que tengas en tu casa, en buenas condiciones, venís, la traes y colgás, y el que tiene frío viene y la retira. Ese es el sentido».

También en la jornada se distribuyeron a personas necesitadas las coloridas y abrigadas frazadas elaboradas con los cuadraditos tejidos de 20 x 20 que la gente fue colaborando, «Estamos muy contentos por la cantidad de gente que ha venido a traer su donación, y desgraciadamente tristes por la cantidad de gente que esta esperando su ración de comida y ropa para abrigarse», expresó otra de las voluntarias desbordada por las sensaciones encontradas.

Además se anunció el lanzamiento de los desayunos solidarios a partir del día viernes, en los que todas las mañanas jóvenes voluntarios salen bien temprano a repartir algo caliente a todas las personas que están en situación de calle y que no tienen un techo donde dormir y resguardarse del frío, «Arrancan el viernes 26 de mayo hasta el once de agosto, de lunes a sábados. Nosotros estamos distribuidos en cinco grupos y nos repartimos cinco zonas de Rosario. Somos 25 voluntarios que elegimos así empezar el día, llevando una infusión caliente y una colación para vincularnos con las personas que pasaron frío», expresó Jorgelina, y concluyó: «Quiero destacar que la gran mayoría son jóvenes entre 20 y 30 años que se levantan a las seis de la mañana, con frío, con lluvia, y salen a la calle. Un ratito de tu tiempo puede cambiar la vida de otra persona».